Al menos 40 muertos en un atentado en un hotel de Islamabad
Unos 15 huéspedes se encuentran atrapados entre las llamas en el hotel Marriott de Islamabad, que sufrió este sábado un atentado con bomba en el que han muerto al menos 40 personas y 90 han resultado heridas, según varias fuentes.
El hotel, muy frecuentado por extranjeros, corre el riesgo de derrumbarse a consecuencia del incendio causado por la tremenda explosión, que pudo oirse a varios kilómetros de distancia.
Una fuente de seguridad del hotel, citada por la agencia estatal APP, dijo que un camión cargado de explosivos estalló en las inmediaciones del edificio, cuya entrada quedó completamente destrozada.
Las fuerzas de seguridad han iniciado la evacuación del edificio y han pedido la intervención del Ejército para salvar a los huéspedes atrapados por el fuego.
Las ambulancias y los bomberos ya se han desplazado a la zona, y los heridos han ido llegando a distintos hospitales capitalinos, en los que ha sido decretado el estado de “emergencia”.
Entre los heridos extranjeros hay al menos, cuatro alemanes, tres ciudadanos de EEUU, uno de Arabia Saudí y un diplomático danés, informó Dawn.
Fuentes diplomáticas españolas y latinoamericanas dijeron a Efe de que entre los muertos y heridos no se encuentran personas de estas nacionalidades.
Las imágenes difundidas por las televisiones ofrecen un aspecto desolador en el interior del edificio, con paredes resquebrajadas, tabiques desplomados y cristales y mobiliario roto.
“Dos horas antes del atentado habíamos estado comiendo en un restaurante del hotel y ahora está destrozado. Es horrible”, dijo una española residente en la capital.
Situado en el corazón de la capital, el Marriott ya había sido objeto de ataques en el pasado, por lo que las medidas de seguridad eran muy estrictas y el acceso resultaba complicado.
El propietario del Marriott expresó a los medios su “profunda consternación” por lo sucedido.
“Lamento la muerte de tantos guardias de seguridad (los principales afectados). Por suerte, el vehículo no pudo penetrar en el hotel”, subrayó.
Este atentado tuvo lugar horas después de que el presidente del país, Asif Alí Zardari, hubiera comparecido por primera vez ante el Parlamento, donde mostró su decisión de acabar con el terrorismo, aunque matizó que “la fuerza sólo es el último recurso”.
En la jornada se habían registrado ya otros dos atentados, contra convoyes militares, que dejaron un balance de ocho víctimas en el conflictivo noroeste del país.
El Gobierno de Pakistán ha decretado un estado de alerta máxima en todo el país.
Tanto Zardari como el primer ministro, Yusuf Razá Guilani, han condenado el ataque y han ordenado una investigación sobre lo sucedido.