Mujica asume la Presidencia prometiendo “crear transformaciones políticas”

MONTEVIDEO, 1 (EUROPA PRESS)

El ex guerrillero de izquierda José Mujica asumió este lunes la Presidencia de Uruguay anunciando un Gobierno de austeridad dada la crisis económica internacional, pero con la promesa de “crear transformaciones políticas a largo plazo”.

“Hay que crear las condiciones para gobernar por 30 años con políticas de Estado. Tanto en educación, seguridad como en la matriz energética. El gobierno tiene más tornillos que nadie, pero de qué sirve sin la parte complementaria. Eso es lo que más se ajusta a la realidad de hoy”, dijo Mujica.

El nuevo mandatario uruguayo recibió la banda presidencial de su antecesor y compañero de partido Tabaré Vázquez, en un acto celebrado en la Asamblea Legislativa de Uruguay, que actualmente preside de forma temporal su esposa y a la vez senadora, Lucía Topolansky.

En la toma de posesión estuvieron presentes el Príncipe Felipe; la secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, y los presidentes de Bolivia, Evo Morales; de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva; de Venezuela, Hugo Chávez; de Colombia, Álvaro Uribe; de Ecuador, Rafael Correa; y de Paraguay, Fernando Lugo, entre otros.

Mujica, de 74 años, reconoció que “hoy es el día cero, o el día uno” de su gobierno y que “mañana comienzan los pasos hacia el purgatorio”, al destacar que mantendrá algunas de las políticas de Vázquez, aunque realizará algunos ajustes para trabajar con mayor intensidad en la reducción de la pobreza.

ECONOMÍA

El nuevo mandatario destacó la necesidad de, a pesar de la crisis mundial, no flexibilizará las reglas macroeconómicas establecidas. “Los recursos fiscales son finitos y las demanda sociales son infinitas” pero “la macroeconomía tiene reglas ingratas pero necesarias”.

“Una macroeconomía prolija es un prerequisito para todo lo demás (...) Vamos a ser ortodoxos en la macroeconomía y lo vamos a compensar siendo innovadores y atrevidos en otros aspectos”, indicó durante su discurso.

“Seremos serios en los gastos, en la política fiscal, en la política monetaria”, dijo al insistir en que los funcionarios de su Gobierno serán “perros en la vigilancia del sistema financiero” de Uruguay para evitar la desestabilización.

No obstante, reconoció la necesidad de seguir trabajando por los indigentes que, según sus cálculos, abarcan el 2 por ciento de la población de Uruguay, así como por aquellas personas que viven en la extrema pobreza.

“Unos recogen los frutos, otros los contemplan”, dijo al tiempo que manifestó que “la educación es el ariete fundamental para combatir la pobreza a futuro, y la vivienda y condiciones dignas de vida son el remedio para el presente”, apuntó, al destacar que no olvidará a los “pobres uniformados de las Fuerzas Armadas”.

Según ha divulgado la prensa local, Mujica ha dicho que está dispuesto ha donar el 87 por ciento de su sueldo como presidente de unos 250.000 pesos (9.400 euros), como parte de sus esfuerzos para ayudar a los sectores más necesitados.

En lo que se refiere a la economía exterior, el nuevo presidente destacó la importancia del Mercado Común del Sur (Mercosur), bloque al que pertenece Uruguay, e insistió en la necesidad de reforzar la integración en la región. “Mercosur es hasta que la muerte nos separe y esperamos una actitud recíproca”, aseveró.

PRIORIDAD EN EDUCACIÓN

Mujica, quien deberá concluir su mandato el 1 de marzo de 2015, hizo especial énfasis en el tema de la educación como una de los mecanismos que utilizará su Gobierno para acabar con la pobreza y brindar “condiciones dignas” a los uruguayos.

“Los temas de Estado deben ser pocos y selectos, sin pretensiones: Educación, Educación, Educación”, reiteró el mandatario. “De ella depende el país”, recordó.

“Los gobernantes deberíamos ser obligados todas las mañanas a llenar planas como en la escuela, escribiendo cien veces debo ocuparme de la educación”, comentó Mujica.

No obstante, Mujica reconoció que “probablemente nadie pueda contestar es a qué cosa vamos a renunciar para darle recursos a la educación”, pues aseguró que “ningún partido querrá quedar en soledad para hacerse responsable de todo ese desgaste” que implicará esta política. “Tendremos que hacerlo juntos, decidirlo juntos y poner el pecho juntos”, expresó.

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