El Observatorio del Roque celebra “con éxito” la primera Escuela CTAO con estudiantes de 12 países para aprender los principios de la detección Cherenkov
La primera Escuela CTAO (Observatorio de la Red de Telescopios Cherenkov), celebrada en el Observatorio del Roque de Los Muchachos (ORM), que finalizó el pasado día 29 de junio, “ha sido un éxito rotundo”, indica el Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC) en un comunicado. Los 27 estudiantes de doctorado, procedentes de 12 países, participaron en este taller de dos semanas que les llevó a Italia y España para profundizar en la ciencia, la tecnología y el análisis de datos de CTAO, “el mayor y más potente observatorio de rayos gamma del mundo que tiene su sede norte” en el complejo astrofísico situado en las cumbres Garafía.
La escuela, añade, comenzó en Bertinoro (Italia) con una clase magistral sobre astrofísica de rayos gamma que incluyó sesiones prácticas sobre cómo preparar una propuesta científica para el prototipo de gran telescopio (LST), el LST-1, ubicado en el ORM. Durante la segunda semana, los estudiantes viajaron a La Palma, en las Islas Canarias. Para aprender “los principios de la detección Cherenkov”, apunta, los estudiantes fueron guiados por los instructores a través de los distintos pasos del análisis de datos, desde la reconstrucción del evento hasta la producción de los resultados físicos necesarios para las publicaciones.
A continuación, los estudiantes hicieron el recorrido desde el aula a nivel del mar hasta el emplazamiento del conjunto norte del CTAO en el ORM para experimentar la vida de los operadores de telescopios. Aprendieron sobre los instrumentos Cherenkov y visitaron el telescopio LST-1. Además, los estudiantes visitaron por la noche la anterior generación de telescopios Cherenkov, los MAGIC, y tuvieron una clase de astronomía óptica, con visitas diurnas y nocturnas al Gran Telescopio Canarias (GTC o Grantecan) y al Telescopio Nacional Galileo (TNG).
“Antes de ir a la escuela, no creía que me interesara mucho la parte instrumental de mi trabajo. Pero al final me quedé maravillada con los telescopios y el increíble paraje de el Roque de Los Muchachos, y me hizo darme cuenta de lo enorme que es CTAO, con toda la gente que trabaja allí, investigadores, ingenieros, técnicos, divulgadores científicos, etc.”, dijo Coline Dubos, estudiante de segundo año de doctorado IJCLab.
Para poner en práctica sus nuevos conocimientos y habilidades, los operadores del LST-1, MAGIC, GTC y TNG compartieron “amablement”e un tiempo de observación con los estudiantes. “En concreto, como aspirante a teórico, fue una gran oportunidad visitar y aprender en profundidad sobre el LST-1 y las otras instalaciones del ORM. Nunca olvidaré la visión del LST-1 con la Vía Láctea como telón de fondo”, afirma Tatsuki Fujiwara, estudiante de segundo curso de la Universidad de Osaka.
Igual de importante, se apunta en la nota, “es que los estudiantes tuvieron tiempo para estrechar lazos y disfrutar de la hermosa isla de La Palma. En su día libre exploraron algunos de los increíbles parajes naturales de la isla”.
“La escuela respondió a todas mis preguntas sobre temas de investigación como los mecanismos de producción de rayos gamma o la física de las cascadas atmosféricas, y me dio la oportunidad de examinar en persona el hardware de los IACT (Imaging Atmospheric Cherenkov Telescope) más avanzados”, dijo Luca Riitano, estudiante de cuarto año de doctorado en la Universidad de Wisconsin-Madison. “Todo ello complementado por las bellas localizaciones en las que tuvo lugar la escuela y las nuevas conexiones establecidas tanto con los conferenciantes como con los estudiantes”.
“Ha sido inspirador ver a la próxima generación de físicos de astropartículas explorar los fundamentos y las fronteras del campo, presentar sus ideas innovadoras y trabajar juntos para mejorar los conocimientos de los demás, todo ello con el telón de fondo de dos lugares fenomenales: Bertinoro y La Palma. Estamos impacientes por repetirlo”, señala Alba Fernández Barral, directora de comunicación de CTAO.
“Nada fue mejor que ver su alegría y asombro cuando experimentaron el trabajo en el ORM, donde se están construyendo otros tres LST y tuvieron la oportunidad de operar la ‘joya de la corona’ del emplazamiento del CTAO-Norte, el LST-1 ”, explica Juan Cortina, investigador del IAC/CIEMAT y presidente del Comité Directivo del LST.
“Este es un momento emocionante para todos los implicados. Traer a estudiantes de todo el mundo para que conozcan un campo y un proyecto que nos apasiona ha sido gratificante y divertido”, afirma Patricia Márquez, ingeniera del IFAE y coordinadora del telescopio LST-1.
La Escuela CTAO fue organizada por la Organización Central de CTAO en cooperación con la Colaboración LST. La celebración de la escuela en La Palma contó con el apoyo de fondos del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades y del Instituto Japonés para la Investigación de los Rayos Cósmicos.
0