El duelo entre Zapatero y Rajoy eleva el tono en el Congreso
Siga aquí la participación de Ana Oramas en el Debate del Estado de la Nación
El duelo que este martes por la tarde enfrentó al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, con el líder del principal partido de la oposición, Mariano Rajoy, en el Debate sobre el estado de la Nación elevó el tono en las bancadas de socialistas y populares, lo que obligó al presidente del Congreso, José Bono, a realizar una decena de llamadas al orden.
Los ánimos comenzaron a exaltarse desde la primera intervención en el hemiciclo de Rajoy, que llegó a enfrentarse a los diputados del PSOE hasta el punto de que en un momento les pidió “callarse” e incluso les acusó de no saber leer.
El líder popular se encaró a los murmullos del Grupo Socialista cuando desgranaba las causas de la crisis y, lejos de amedrentarse, les espetó: “Sé que de esto no saben una palabra, pero hagan el favor de callarse”. Y abundó: “Escuchen, que les vendrá muy bien”.
Más adelante, y después de que Bono tuviera que intervenir para calmar los ánimos que las palabras de Rajoy estaban provocando, el presidente del PP volvió a combatir los murmullos del Grupo Socialista con un improperio: “Pero si ustedes no saben leer”, les dijo en otro momento, causando protestas en las bancadas del PSOE.
Zapatero reprocha a Rajoy su estilo faltón
Cuando llegó su turno de réplica, el propio presidente del Gobierno salió en defensa de sus diputados al subirse a la tribuna de oradores, recordándoles que representan a once millones de electores. Además, puso de relieve el, a su juicio, “estilo faltón y despreciativo” de Rajoy.
En esta línea, Zapatero quiso dejar claro al líder popular que “no es maestro en dar lecciones, sino maestro en perder elecciones”, una afirmación que arrancó la sonrisa de la bancada socialista y los abucheos de la del principal partido de la oposición.
Otra de las afirmaciones que provocaron airadas reacciones en el hemiciclo la pronunció Zapatero, cuando acusó al PP de “jalear, servirse y aprovecharse de la crisis económica para ganar las elecciones”. Esta aseveración originó mayores exclamaciones entre los diputados 'populares'. “¡Qué malo eres!” o “¡Gobierna ya!” fueron algunas de las expresiones que se pudieron escuchar.
El PP alaba con 'olé' a su presidente
Pero la misma sentencia también fue contestada por el presidente de los populares en su segunda intervención, en la que aseguró que no aceptaba esa afirmación por ser “impropia” de un presidente del Gobierno, además de “mentira”, y por suponer, en su opinión, “una excusa de mal pagador”. Sus palabras fueron acogidas con un “olé” de sus compañeros de filas, si bien cuando a Zapatero le tocó replicarlo no sólo no retiró su acusación, sino que se reafirmó en ella.
Otro de los momentos de tensión vino cuando Zapatero retó a Rajoy a que diera cuenta del contenido de sus reformas laborales, dejándole claro antes que los socialistas nunca iban a aceptar un abaratamiento del despido o el despido libre, como, a su juicio, defiende el PP, lo que puso en pie a los diputados socialistas. Esta tesis fue, sin embargo, rebatida por Rajoy, quien cosechó aplausos de su bancada cuando sentenció que “no hay despido más libre que el que se cobra cada día 7.000 parados más”.
Alusiones a la lucha antiterrorista
El ambiente también se alteró durante el Debate sobre el estado de la Nación cuando Zapatero echó en cara a Rajoy que le aconsejase “rectificar” su política económica como también lo hizo con la lucha antiterrorista. El jefe del Ejecutivo pidió al presidente del PP que hiciera referencia a esta cuestión recordándole, eso sí, la falta de respeto en la que cayó en la pasada legislatura cada vez que abordó este tema.
Éstas y otras afirmaciones hicieron que Bono se viera obligado hasta en una decena de ocasiones a pedir calma y silencio a los parlamentarios para que el duelo pudiera continuar con normalidad, lo que no se consiguió hasta casi el final de este enfrentamiento dialéctico.