Gallardón: La etapa de “diferencias” con Aguirre está “superada”

MADRID, 03 (EUROPA PRESS)

El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, ha opinado que, en un régimen parlamentario como el español, no tiene sentido limitar los mandatos a dos, como sí ocurre en regímenes presidencialistas como el estadounidense o el francés.

En una entrevista en la Cope recogida por Europa Press, el primer edil se ha referido así a las palabras del secretario general del PSM, Tomás Gómez, que opinó que los cargos electos deberían permanecer un máximo de dos legislaturas.

“Eso tiene sentido en regímenes presidencialistas, no parlamentarios. Cuando uno es elegido directamente por los ciudadanos y no está sometido al control del parlamento como en EE.UU. o Francia, por esa ausencia de control cobra sentido limitar los mandatos. Con los regímenes parlamentarios, la censura sobre el gobierno es permanente, y de hecho la misma elección se hace por el Congreso, por lo que no tiene sentido limitar los mandatos”, ha explicado el primer edil, extendiendo además este razonamiento a otros cargos como los alcaldes.

A renglón seguido, ha señalado que si la propuesta del secretario de los socialistas madrileños es “convertir la democracia española de parlamentaria en presidencialista, que al parecer es lo que quiere Gómez”, su respuesta a eso es “no”.

RAJOY ES EL MEJOR CANDIDATO

Preguntado por si el presidente del PP, Mariano Rajoy, es el mejor candidato para las elecciones generales de 2012, Gallardón ha afirmado que “rotundamente sí” porque es “el que mejor identifica el discurso del partido y porque ha sido elegido democráticamente y apoyado por todos los militantes en el último congreso nacional”.

“Esas tribulaciones que acompañan al PSOE sobre su candidatura a la Presidencia del Gobierno de ninguna forma están en el PP. Tenemos muy claro nuestro liderazgo, nuestro mensaje, nuestro discurso político y nuestro compromiso con los ciudadanos. Y, desde esas pautas, presentaremos un proyecto, convencidos de que podrá recuperar lo que estos años hemos perdido, de la misma forma que en 1996, con una situación muy difícil, también asumimos el gobierno y situamos a la Nación en una posición de liderazgo que nunca debió perder”, ha señalado.

Sin embargo, el regidor madrileño ha eludido pronunciarse sobre su deseo de que Rajoy lo incluya en las listas al Congreso de los Diputados, como hizo hace cuatro años.

“A mí el presidente del PP me ha pedido, y yo he agradecido mucho por supuesto que renueve su confianza en mí, que sea candidato a la Alcaldía y que continuemos el proyecto de cambio de la ciudad”, ha recordado Gallardón.

“No cometeré de nuevo ese error. Rajoy me ha dicho que centre mis esfuerzos y mi trabajo en Madrid y a eso me voy a dedicar”, ha insistido, apuntando que hace cuatro años se postuló para ser diputado además de alcalde y fue “un error hacerlo en público” porque “se entendió mal” y “fue justamente criticado por personas que dijeron, desde el afecto, que no era el camino adecuado”.

RELACIÓN CON AGUIRRE

Esas 'quejas' provinieron, precisamente, del entorno de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, algo que a juicio de Gallardón es normal en “todos los partidos políticos, que son (organizaciones) extensas, democráticas y plurales”.

“Lógicamente, hay diferencias (entre las personas). En nuestro caso son infinitamente más las coincidencias que las diferencias, pero han existido históricamente en la vida interna del partido diferencias entre (el vicealcalde,) Manuel Cobo, y Esperanza (Aguirre), especialmente, porque en un momento determinado los dos plantearon modelos distintos para la Presidencia del partido en Madrid”, ha explicado.

En cualquier caso, ha asegurado que ésa es “una etapa superada” que “ha sido absolutamente sustituida por la colaboración y el trabajo interno en el partido y entre las administraciones, lo que nunca dejó de existir”.

“Y puedo asegurar que ese abrazo (entre Cobo y Aguirre ayer tras la entrega de unos premios) no era única y exclusivamente fruto de la cortesía o del debido respeto entre personas, lo que jamás se ha perdido, sino que respondía a un deseo sincero de trabajar conjuntamente para conseguir lo mejor para los madrileños y para el PP”, ha zanjado.

ELECCIONES

Finalmente, el alcalde madrileño se ha referido a sus propuestas electorales de cara a los comicios de mayo de 2011. Así, ha indicado que su “gran reto” será hacer “el Madrid del futuro” a través de una modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de la capital.

“Ése va a ser el gran reto de la próxima legislatura: hacer el Madrid de nuestros hijos e incluso de nuestros nietos. Porque cambiar un PGOU, y más con la ambición y participación ciudadana con que vamos a hacerlo, marcará pautas para las próximas generaciones”, ha señalado.

Así, ha avanzado que su idea es, por un lado, hacer una ciudad que se “mire más a sí misma y a su historia”, en contraposición con lo que ha sucedido a lo largo de la historia, durante la que cada nuevo avance urbanístico suponía dejar atrás y “abandonar” lo realizado por las generaciones anteriores.

“Creo que la clave del futuro está en recuperar nuestro pasado. Tenemos que ser conscientes de que las grandes ciudades de Europa nacen desde el centro hacia fuera, que es el centro histórico el que les da sentido. Por eso no podemos tener un centro abandonado, degradado ni deshabitado. Yo no soy partidario del modelo anglosajón de 'city' muy viva de día pero muy muerta de noche. Quiero un centro vivido”, ha destacado Gallardón.

Y precisamente ésa es la segunda clave de esta reforma del PGOU: hacer que las posibilidades de vida en el centro sean como las de los nuevos desarrollos urbanísticos, donde hay todo tipo de recursos --escuelas infantiles, centros de mayores, polideportivos...-- a disposición de los vecinos.

“Ésa es la gran operación que el PGOU tiene que abordar: dar la misma calidad de vida en el Madrid histórico que en los nuevos desarrollos urbanísticos. Y, para eso, el peatón tiene que ser protagonista”, ha apostillado, señalando que la reforma de la calle Serrano ha servido, en cierto modo, de 'experiencia piloto'.