Gobierno y PSOE acusan al PP de ''doble moral'' en el proceso de paz
El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, y el secretario de Organización del PSOE, José Blanco, acusaron este viernes al PP de practicar una “doble moral” en el proceso para el fin del terrorismo de ETA emprendido por el Gobierno.
Estas acusaciones de los dirigentes socialistas se produjeron un día después de que el Tribunal Supremo (TS) emitiera un auto en el que considera que no hay obstáculos para que los partidos políticos y la formación ilegalizada Batasuna tengan contactos siempre y cuando no haya una “orden expresa” que los prohíba.
El auto rechaza así una querella presentada por el sindicato Manos Limpias a raíz de la reunión de dirigentes socialistas vascos con integrantes de Batasuna el pasado 6 de julio.
La resolución del Tribunal Supremo, que avala por tanto las reuniones con la formación de Arnaldo Otegi, motivó que este jueves el presidente del PP, Mariano Rajoy, opinase que “no es moral” hablar con ETA de Navarra o de “hacer algo parecido al plan Ibarretxe”.
Rubalcaba, en respuesta, afirmó este viernes que el PP pone en práctica con declaraciones como esas una “doble moral”, ya que, explicó, cuando los populares mantenían contactos con Batasuna, se trataban de reuniones “morales”, algo que sin embargo no ocurre cuando los contactos los mantienen dirigentes del PSOE.
“Una vez que el Supremo ha declarado legales esas reuniones, Rajoy sale y dice que son inmorales y ese es un adjetivo que en boca del señor Rajoy, en relación con este tema, resulta inadmisible”, añadió.
Para el ministro del Interior la decisión del TS es “importante” por cuanto, y recordó las palabras de la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, “abre un camino” que el PP, a su juicio, ha intentado obstaculizar en el marco del proceso de paz en Euskadi.
José Blanco se manifestó en Oporto, donde se celebra la clausura del VII Congreso de los socialistas europeos, en términos muy parecidos.
Tras recordar que la querella de Manos Limpias iba dirigida a su persona, entre otras, aseguró que el Tribunal Supremo decidió lo que debía porque “no es concebible que reunirse con una persona pueda ser delito en un país democráticamente avanzado”.
Y continuó: “Lo que llama la atención es la doble moral del Partido Popular, que cuando las sentencias no le gustan, le ponen dificultades”.
El auto no legitima la negociación política, según el PP
Sin embargo, el PP, por medio de su secretario de Economía, Miguel Arias Cañete, consideró que la resolución judicial del Supremo no significa “legitimar la negociación política” ni “abrir nuevos caminos” en el llamado proceso de paz.
El dirigente popular expresó su respeto por el auto del Tribunal, pero señaló que su contenido no guarda relación alguna con los análisis que de él están haciendo el Gobierno y el PSOE.
“El auto lo que ha dicho es que la querella criminal, referida al contacto -del PSE-PSOE con Batasuna-, no constituía delito”, dijo Arias Cañete.
A su juicio, el Gobierno no puede afrontar negociaciones políticas cuando ETA, apuntó, “no tiene voluntad de abandonar las armas”.
El portavoz del PNV, Iñigo Urkullu, expresó su confianza en que la resolución del TS sirva para que el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) “tome nota” y “dé carpetazo definitivo a la querella” que pesa sobre el lehendakari, Juan José Ibarretxe.
Los actos de violencia callejera no cesan en el País Vasco, donde un grupo de desconocidos vertieron anoche líquido inflamable a dos cajeros automáticos de una oficina de la entidad bancaria Kutxa en Pasaia (Guipúzcoa).
La presidenta del PP en esta provincia, María José Usandizaga, se refirió a este hecho al considerar “irresponsable” que los socialistas vascos y Batasuna tengan intención de proseguir los contactos cuando se acumulan ya “casi 200 actos de violencia callejera” tras el alto el fuego de ETA.