Zapatero: ''Estamos satisfechos y el PP también''
Esa satisfacción compartida fue la que provocó que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, destacara que “una de las grandes virtudes de la democracia” es que un día después de la celebración de las elecciones autonómicas y municipales él mismo pueda estar “satisfecho” y el PP “también”. No quiso entrar en más detalles sobre los comicios, que otorgaron más votos al PP y más concejales a los socialistas, y emplazó a analizar los resultados con más calma.
La avalancha de interpretaciones de los resultados por parte de los dirigentes socialistas y populares se resumieron en las intervenciones del secretario de Organización socialista, José Blanco, y del líder del principal partido de la oposición, Mariano Rajoy. Blanco, tras la reunión de la Ejecutiva socialista que analizó los resultados, hizo una enumeración de los datos de los comicios en algunos municipios y Comunidades y concluyó: “el resultado político de este proceso será un aumento sustancial de poder municipal y autonómico del PSOE, y una bajada igualmente sustancial del PP”.
“El triunfo que celebró el domingo Rajoy consiste en haber perdido varias capitales de provincia, Vigo y Mérida, dos comunidades autónomas y cinco diputaciones provinciales”, sentenció.
“Vuelco electoral”
Pero la versión ofrecida por Rajoy fue bien distinta, ya que expresó su satisfacción por el hecho de que el Partido Popular lograra el 27-M los mejores resultados que ha tenido a lo largo de su historia“ en número de votos y porcentaje. Por ello habló de un ”vuelco electoral“ respecto de 2003 y garantizó que seguirá trabajando con el fin de ganar las generales de 2008.
También el líder de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, dedicó parte de la jornada al análisis de los resultados de los comicios, en los que dijo observar, pese a algunos reveses, una “tendencia positiva” para su formación política. Pero más allá de ello, emplazó al PSOE, a la “izquierda plural” y a los “nacionalistas de izquierda” a configurar nuevas “mayorías y alternativas de izquierda” y gobiernos de “progreso” y “sociales” tanto en Navarra como en Baleares.
En relación con la situación en la primera de esas dos comunidades, Zapatero, a puerta cerrada y según informaronfuentes del PSOE, instó a la Ejecutiva socialista a ser muy prudentes en la negociación del gobierno de Navarra y, sobre todo, del ayuntamiento de Pamplona, donde se mostró contrario a propiciar algún acuerdo en el que participe ANV. Ya en rueda de prensa, Blanco adelantó que los socialistas no prevén ningún tipo de acuerdo ni con el PP ni con ANV para formar gobiernos municipales y autonómicos tras las elecciones del domingo debido a que sus posiciones políticas son “muy antagónicas”.