''Canarias debe ser asunto de Estado o se convertirá en un problema de Estado''
El presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero (CC), ha asegurado que el próximo Gobierno de España que salga de las Elecciones del 20N “debe tener muy presente que Canarias debe ser asunto de Estado o se convertirá en un problema de Estado”, según puso de manifiesto el nacionalista en la última entrada de su blog.
“Sea cual sea el resultado del 20-N, en lo alto de la agenda del nuevo Gobierno debe estar evitar el recrudecimiento de las tensiones en esa doble vertiente -social y territorial-, y eso pasará por demostrar flexibilidad, respeto institucional y compromiso”, dijo.
De esta manera comentó que en las últimas semanas, desde Cataluña se está insistiendo en la reclamación de un nuevo pacto fiscal. “Desde Canarias”, continuó, “seremos firmes en la reivindicación de la necesidad de un sistema de financiación específico para las islas -al margen del marco genérico por el que se rigen las distintas comunidades autónomas- así como de la puesta en marcha de medidas que den respuesta a las dificultades añadidas con las que un territorio de nuestras características se ve obligado a hacer frente a una crisis global”.
“Ahora más que nunca”, reiteró Rivero, “el próximo Gobierno del Estado debe tener muy presente que Canarias debe ser asunto de Estado o se convertirá en un problema de Estado”.
Por su parte, comentó que a las puertas de un cambio en el Gobierno del Estado, -ya que opinó que ocurra lo que ocurra el 20-N, el Gobierno será otro-, es necesario que en la próxima legislatura se atiendan, entre otras, dos cuestiones.
De un lado, aseguró que es fundamental que a partir del 21 de noviembre en España se den los pasos que la sociedad está demandando para salir de la crisis política que en los últimos años está “entorpeciendo, cuando no bloqueando”, una salida a la crisis económica.
“Crisis política, sí. Porque en esos términos cabe referirse a la incapacidad para alcanzar acuerdos que la extrema dificultad de la situación económica y social reclamaba y reclama a gritos. Que en los últimos cuatro años no se hayan logrado esos grandes acuerdos -pactos de Estado- ha constituido un fracaso de la política, de los políticos, de los partidos. Un fracaso de todos, en definitiva”, aseveró Rivero.
El presidente canario preguntó así que, “¿cómo es posible que en los años setenta se aparcaran las delicadísimas diferencias existentes y ahora, con décadas de recorrido democrático, la política se haya mostrado incapaz de dejar a un lado los desencuentros y los intereses de partido? Lo que se ha vivido en España en la última legislatura ha sido una crisis política, y mientras no se salga de la crisis política no se saldrá de la crisis económica”.
Por otro lado, vio imprescindible que el próximo Gobierno del Estado no caiga en el error de gobernar dando la espalda a las restantes fuerzas políticas o a las comunidades autónomas; o lo que es lo mismo, a los planteamientos y a las reivindicaciones de los diferentes territorios, especialmente de Canarias.
“A las nefastas experiencias de las mayorías absolutas me remito -malas experiencias para España y malas también para los partidos que cometieron el error de equivocarse absolutamente, pues acabaron pagándolo en las urnas-. Ahora bien, si malos resultados trajeron consigo las posiciones inflexibles y la falta de diálogo en otras legislaturas, en la coyuntura actual un Ejecutivo que gobierne dando la espalda y desatendiendo al resto de los grupos parlamentarios, a los agentes sociales o a lo que se plantea desde determinados territorios del Estado, se convertiría en el responsable primero de las tensiones sociales y territoriales que esa actitud generaría”, concluyó.