Sin noticias del Instituto de Investigaciones Sanitarias

El proyecto de crear el Instituto Canario de Investigaciones Sanitarias, que inició María del Mar Julios cuando fue consejera de Sanidad de 2003 a 2007, ha sufrido un nuevo parón, ésta vez por culpa del pulso interno entre los críticos de Coalición Canaria (CC) en Tenerife y el presidente del Ejecutivo, Paulino Rivero.

Un proyecto que Rivero ha encargado a la consejera Brígida Mendoza que, a su vez, dejó en manos del ex director general del Servicio Canario de Salud (SCS), Antonio Cabrera, el impulso del mismo y los estudios necesarios para ponerlo en marcha.

Sin embargo, la efervescencia política en el seno de los nacionalistas tinerfeños enfrentados a Rivero, cuyas cabezas más visibles son Ricardo Melchior, Manuel Hermoso y Fernando Clavijo, ha 'obligado' al presidente a paralizar su puesta en marcha, según ha podido saber CANARIASAHORA.

Un pulso que bebe de la vieja aspiración de que el Instituto de Investigaciones Sanitarias pivote en torno al Hospital Universitario de Canarias (HUC) y la Universidad de La Laguna, idea que en su momento impulsó en la pasada legislatura el senador del PP y entonces vicepresidente del Cabildo tinerfeño, Antonio Alarcó.

La clave tinerfeña

Un proyecto en clave tinerfeña que contó con la oposición de Mercedes Roldós, en aquel momento consejera de Sanidad y compañera de filas de Alarcó, y que tampoco obtuvo el plácet del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII), que es quien aprueba las solicitudes, porque no tenía la suficiente 'masa crítica' para hacerlo operativo.

Tras el rechazo del ISCIII, se intentó incluir al Hospital de La Candelaria en el proyecto, pero la dirección del centro rechazó incorporarse al mismo por entender que desde el principio se había excluido al hospital de la gestación del organismo y que solo pidieron ayuda sus promotores cuando recibieron la negativa estatal a su acreditación.

Los impulsores tinerfeños del Instituto, que solamente iba a ser provincial, cesaron de seguir con su idea adelante. Hasta ahora, cuando el presidente Rivero ha querido impulsarlo a nivel regional, aunque ha tenido que, de momento, dar marcha atrás y esperar a tiempos menos turbulentos.

Y eso a pesar de que, según diversas fuentes consultadas, contaba con el apoyo tanto de sus socios del PSC como del PP.

Impulsar la biomedicina

La Ley de Cohesión y Calidad del Sistema Nacional de Salud del año 2003 establece en su artículo 50 que se promoverá la configuración de institutos de Investigación Sanitaria mediante la asociación de centros de investigación que serán acreditados por el Ministerio, a propuesta del ISCIII y de las comunidades autónomas.

Con posterioridad, el entonces Gobierno presidido por José María Aznar aprobó un Real Decreto, en febrero de 2004, establecía el concepto de Instituto de Investigación Sanitaria, los criterios y el procedimiento de acreditación.

Ese Real Decreto establece que los institutos de Investigación Sanitaria son el resultado de la asociación a los hospitales docentes e investigadores del Sistema Nacional de Salud, de las universidades y otros centros públicos y privados de investigación.

En el caso de Canarias, la idea tanto de Julios como de Roldós y, ahora, Mendoza es que participen la totalidad de los actuales hospitales de referencia del Archipiélago, así como ambos centros educativos superiores, pues el fin último de este nuevo organismo sería potenciar los hospitales como centros de investigación dotándolos de los instrumentos necesarios constituir el lugar idóneo para la captación de talento y la ubicación de las grandes instalaciones científico-tecnológicas.

Es decir, aquellos hospitales que no integren el futuro instituto quedarán fuera del circuito de inversiones en I+D+i en el campo de la biomedicina.

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