La renovación en La Caja provoca la primera crisis política entre PSOE y NC
Aunque se gestó antes, todo se precipitó en la votación de la Asamblea General del 19 de diciembre pasado. PSOE y Nueva Canarias tenían un acuerdo para apoyar a Nardy Barrios (Compromiso por Gran Canaria) para el Consejo de Administración y a Eduardo González (PSOE) para la Comisión de Control, sobre todo cocinado del lado socialista por el secretario insular, José Miguel Pérez. Pero de uno y otro bando se daban largas para formalizar por escrito el pacto.
Con el concejal de Las Palmas de Gran Canaria Néstor Hernández y el diputado autonómico Blas Trujillo (PSOE) al frente de las negociaciones, se produjo un viraje ante lo que los socialistas consideraban largas de Nueva Canarias. Trujillo ha mantenido intensos contactos con el consejero de Economía y Hacienda del Gobierno de Canarias, José Carlos Mauricio (CC), en la negociación de los Presupuestos de la Comunidad Autónoma para 2007, y de ahí surgió la propuesta final de apoyarse PSOE y CC en La Caja: la concejal capitalina de CC Alicia Gómez iría al Consejo y el socialista Eduardo González, a la Comisión de Control.
Nueva Canarias se sintió traicionada en el último minuto, cuando acudió al PSOE para formalizar su acuerdo anterior con Nardy como miembro del Consejo. El PSOE consideró que llegaba tarde, al tener ya cerrada una candidatura que contó con el visto bueno del presidente del partido y candidato a la alcaldía de Las Palmas de Gran Canaria, Jerónimo Saavedra. Ahí se escenificó la ruptura PSOE-NC y el pacto PSOE-CC, también como un mensaje a ATI-CC y al PP en Canarias y su futuro Gobierno autonomo: en Tenerife pueden pactar entre ustedes, aquí lo podemos hacer entre nosotros.
NC también lanzó otro mensaje de calado al PSOE: no es la pata de nadie. Por eso decidió votar la lista del PP, que provocó que ni Alicia Gómez ni Eduardo González alcanzaran los objetivos de Coalición y el Partido Socialista. Y de paso advirtio a los socialistas que no están a su disposición sin más para dar el ayuntamiento a Jerónimo Saavedra y el Cabildo a José Miguel Pérez. Ha sido a nivel insular donde más ha chirriado la ruptura PSOE-NC, para mayor enfado de José Miguel Pérez.
Nueva Canarias y Compromiso por Gran Canaria calcularon que el mensaje al PSOE sólo conllevaba un empate técnico en La Caja entre PP y PSOE. Sin embargo, nuevos movimientos entre la representación de impositores por parte del Partido Popular le han dado el control de la misma, al menos durante un tiempo, hasta el punto de que el vicepresidente tercero del Cabildo y mano derecha de José Manuel Soria, Luis Larry Álvarez, ha sido nombrado presidente de la Comisión de Control.
Quien presida el Consejo de Administración, en sustitución de Antonio Marrero, queda también en manos del Partido Popular. Al menos hasta 2009.