Periodismo, ¿vocación de unos, negocio de otros?

Redacción de un periódico

Romina Cabeza Izquierdo

San Sebastián de La Gomera —

Alguna vez hemos escuchado que vivimos en la sociedad de la información, rodeados continuamente de nuevos datos, noticias que cambian según transcurre el tiempo o bien dependiendo de cada medio. ¿Rentabilidad, negocio o tan sólo mantener a una sociedad informada? En los últimos años del siglo XX y los primeros del XXI surgió una proliferación de medios de comunicación en España, considerada para unos una necesidad del mercado y para otros, una demanda ciudadana. Lo que sí está claro es que muchas empresas se crearon con fines meramente políticos.

Periodismo en cifras

La crisis ha llegado a todos los sectores, entre ellos la comunicación. Un estudio realizado por la Asociación de la Prensa de Madrid en su Informe Anual de la Profesión Periodística 2014 refleja la situación en la que se encuentra la profesión, revelando al mismo tiempo datos que permiten continuar con la ilusión y entusiasmo por esta vocación. Según el informe existen 9.451 personas desempleadas en el sector, de ellos el 64% son mujeres y un 36% hombres. No obstante, por primera vez ha descendido el número de periodistas en paro desde 2008. Otro aspecto llamativo es que se ralentizado el ritmo de cierres de medios de comunicación que alcanzan ya los 364. Un hecho que se opone a otro dato positivo reflejado en el estudio y es la creación de nuevos medios, principalmente digitales. En 2013 se contabilizaron 297 nuevos medios, llegando esta cifra a 407 en 2014.

Por tanto, no todo en el sector es negativo, pues mientras unos medios desaparecen, otros nacen para dar cabida a los profesionales con vocación. Aquí cabe destacar que precisamente es en los medios digitales donde la mujer ha ido ganando presencia hasta el punto de que las periodistas directivas suponen ya el 48% en el mencionado ámbito. Entre los años 2013 y 2014 el porcentaje de mujeres en puestos de dirección en medios impresos pasó del 24 al 28% y en los medios audiovisuales este aumento fue aún mayor pasando del 28 al 36%.

En los últimos años ha aumentado de forma considerable los periodistas que trabajan como autónomos llegando a un 30%, sin embargo estos cobran menos que los que trabajan en comunicación. Una prueba de ello es que del total de los contratados sólo un 15% cobra menos de 1000 euros, mientras que en los autónomos esta cifra se eleva hasta el 52,8%.

El informe también ha abarcado las condiciones laborales y salariales en las que actualmente se encuentran los profesionales, para los encuestados que trabajan en periodismo contratados la reducción de salario en su medios pasó del 76,3% en 2013 al 85,1% en el año 2014. Asimismo, en aquellos que se dedican a la comunicación corporativa la reducción salarial pasó del 61,2% al 73,3%.

Un escenario que presenta por un lado a un sector en continúo esfuerzo por sobrevivir y mejorar sus condiciones, así como demostrar la valía e importancia que tienen en el día a día, y por otro una sociedad que les muestra muy poca confianza y credibilidad. Como prueba de ello es que la nota obtenida en una escala de un 1 a un 10 fue de un 5,3 en el último año y de un 5,2 en 2013, debido principalmente a los intereses políticos de los profesionales de la comunicación, los intereses económicos de las empresas y la falta de independencia.

La nueva tendencia

Como ya se citaba con anterioridad, una importante salida para los periodistas ha sido la digitalización de la información, de hecho más del 70% de profesionales consideran que este medio fortalece al sector, al ofrecer inmediatez, una rápida actualización de los contenidos, así como una mayor especialización de los mismos. Por esta razón, en los últimos años muchos profesionales han optado por lanzar medios en formato digital, principalmente páginas web informativas.

Junto con todos estos cambios que se han producido en el sector han surgido también nuevas figuras como es la del ya conocido community manager. Una profesión enfocada al marketing digital y el encargado de establecer la relación entre la empresa y los clientes. Como así ha indicado la community manager Cintia Fernández, con amplia experiencia en este ámbito, “la aparición de las redes sociales ha provocado un profundo cambio en el periodismo y ha transformado por completo la forma de hacer las cosas”. La profesional establece una comparación como si de un terremoto se tratara, “que en su momento, lo puso todo patas arriba, y todavía hoy se busca la manera más adecuada de fijar un orden, es decir, de integrar las redes sociales de la manera más eficaz en el periodismo y trabajar con ellas. La base es la misma (informar al público), pero contamos con estas nuevas y potentes herramientas que hay que saber utilizar correctamente”.

Fernández señala la importancia de saber utilizar correctamente las redes, al suponer una herramienta potentísima para estar en contacto permanente con el público, además de para mantener un diálogo constante con estos y compartir el contenido a un mayor número de personas. “Hay que apostar por la calidad, debido a que el público quiere información fiable, contrastada y veraz. Por lo general, los contenidos periodísticos de mayor calidad son los más compartidos en internet”, sostiene.

Por tanto, estamos ante una nueva profesión en auge que en España la desarrollan miles de personas. Apenas hace tres años no existía ni el término y hoy en día podemos observar como circulan centenares de ofertas de empleo donde las empresas demandan este sector. Tal es la importancia que ya se ha creado la Asociación Española de Responsables de Comunidades Online (AERCO).

No obstante, surgen varios interrogantes en cuanto a esta nueva vocación. Como así ha recalcado Fernández, “aún hoy existe la creencia de que cualquier usuario con un perfil personal en Facebook puede gestionar de manera profesional las redes sociales de una empresa. No es así. Se necesitan conocimientos sobre la materia, una formación continua, un plan de Social Media, estrategias de comunicación, y habilidades de redacción, entre otras cosas. De ahí que muchos periodistas hayamos encontrado en el community management una nueva vía de trabajo en expansión. ”Adaptarse y evolucionar o quedarnos por el camino“.

Una figura difusa en relación a la formación académica necesaria para desempeñar esta profesión, porque por un lado como ya decía anteriormente la community, no cualquier usuario de redes está preparado para desempeñar esta función y por el otro, empresas que no especifican en sus ofertas conocimientos técnicos determinados o una definición exacta de las funciones a realizar. Y ante esto también surgen determinadas escuelas de negocio que intentan sacar partido a esta confusión llegando a cobrar precios desorbitados por un curso o máster en esta materia.

Así es que la aparición de las redes sociales ha llevado consigo consecuencias que han obligado a las empresas a modificar sus estrategias comunicativas. Un nuevo escenario en el que los periodistas utilizan los medios sociales para hacer preguntas, localizar fuentes u obtener información acerca de un determinado tema y los lectores recurren a estas para estar informado de una forma inmediata y sencilla, así como para comentar los acontecimientos más noticiosos.

Conclusiones congreso

Como así se trato hace unas semanas en el XVI Congreso de Periodismo Digital donde se concentraron más de 75 profesionales de todo el mundo, existen medios que actúan como órganos de propaganda y periodistas en determinadas partes del mundo que por ejercer su vocación pueden perder lo más importante, la vida. Hoy en día estamos expuestos ante un sinfín de proyectos que nacen con la única intención de informar y ahí internet facilita el proceso. Para numerosos ponentes allí presentes la red de redes es “un arma de doble filo que se debe saber utilizar porque es la hora de hacer periodismo y esa es nuestra responsabilidad”.

Finalmente, se consideró que la comunicación de hechos, de ideas, también se hace con imágenes, pues si a principios de siglo predominaba el texto con la llegada de la fotografía ha cambiado dicho equilibrio. Así es que estamos ante una generación de lectores que demandan imágenes y otra forma de redacción visual. Sin duda alguna, un sector que ha experimentado cambios notables, debido a que estamos en un momento en el que prevalece la actualidad inmediata, junto al boom de las redes sociales. En definitiva, otra forma de hacer periodismo.

Indicadores de calidad

En el año 2008 la Unesco estableció unos indicadores que permiten analizar y evaluar las necesidades específicas que presentan los medios de comunicación. Todo ello con el objetivo de llevar a cabo políticas informativas adecuadas, centradas en estructuras viables y en líneas editoriales sólidas. Asimismo, a través de dichos indicadores se podrá saber cual es el grado de cumplimiento de las funciones de los medios, además de comprobar la calidad de los contenidos y ver si existe una relación coherente entre las características de las empresas, los servicios que ofrecen y el número de trabajadores.

Los medios deben contribuir al fomento y desarrollo democrático, y ello acompañado por una serie de aspectos, como unas instituciones que apoyen y garanticen la libertad de expresión, así como transparencia en las empresas de comunicación.

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