En Canarias se producen 5.000 muertes al año por paradas cardiorrespiratorias
En Canarias se producen 5.000 muertes al año por paradas cardiorrespiratorias, según informó este jueves la consejera de Sanidad, Mercedes Roldós, durante la presentación de cinco desfibriladores para las instalaciones deportivas de Granadilla, en el sur de Tenerife.
Roldós, que estuvo acompañada del consejero insular de Sanidad, Antonio Alarcó, del director del área de Salud de Tenerife, José María Casañas y de la edil de Salud en el Ayuntamiento granadillero, Carmen Navarro Morales, indicó que sólo el 10% de las personas que padecen una parada cardiorrespiratoria sobreviven.
La consejera insistió en la necesidad de aplicar políticas “cardiosaludables” que no sólo pasan por la creación de medios técnicos, como en el caso de los desfibriladores, sino por “educar” en técnicas de reanimación cardiovascular o “resucitación básica”.
“El vecino tiene que saber lo que tiene que hacer y lo que no”, añadió.
Las paradas cardiorrespiratorias son la primera causa de secuelas físicas y otras minusvalías que “convierten a las personas en dependientes”, según Roldós.
Los desfibriladores se llevan incorporando en Canarias desde octubre de 2008 hasta completar un total de 34 en diferentes puntos, como aeropuertos, playas, todas las ambulancias, hospitales y en este caso instalaciones deportivas, las primeras en dotaciones de este tipo.
Antonio Alarcó añadió que al año mueren 50.000 ciudadanos de muerte súbita y que los desfibriladores “pueden evitar muchas de ellas en los primeros cinco minutos de intervención”.
Los desfibriladores instalados en diferentes campos deportivos de Granadilla cuentan con la colaboración de la Obra Social de La Caixa y para su uso en casos de emergencias se han formado a 26 personas, entre Policía Local, Cruz Roja, Bomberos Voluntarios y Protección Civil.