El Cluster Audiovisual, contra la gestión de Willy García
La Junta Directiva del Cluster Audiovisual Canario ha tomado la decisión de unirse a Acepa (Asociación Canaria de Empresas de Producción Audiovisual) y exigir la destitución del director General de RTVC, Guillermo García, y de Rubén Fontes, responsable de producción, por su ''nefasta gestión basada en el engaño a las empresas“.
El audiovisual es actualmente uno de los sectores estratégicos más importantes a nivel nacional, por lo que su desarrollo y potenciación es pieza clave de las políticas desarrolladas por comunidades autónomas como Cataluña, País Vasco, Comunidad Valenciana o Galicia que llevan años apostando decididamente por la promoción de sus industrias locales teniendo en todos los casos un elemento común fundamental: las televisiones autonómicas debe actuar como verdaderos motores de esta industria en las comunidades.
Sin embargo, lejos de seguir esta estela, la Junta Directiva del Cluster Audiovisual Canaria critica en un comunicado que la Radio Televisión Canaria (RTVC) se ha alejado, especialmente en los últimos años, de parámetros basados en la calidad, el apoyo a las empresas isleñas y los principios básicos que acompañaron su creación, por lo que ha tomado la decisión de unirse a Acepa para “exigir” la destitución del director General de RTVC, Guillermo García, y de Rubén Fontes, responsable de producción, por no ser capaces de capaz de ''mantener la calidad ni estabilizar la industria“ y, por lo tanto, los puestos de trabajo y, punto fundamental, ”sin satisfacer las necesidades de unos espectadores que esperan una televisión cercana, que acerque la realidad de todas las Islas y esté presente en los acontecimientos más significativos de éstas“.
Explican que en base a la necesidad estabilizar el sector y lograr su mayor desarrollo, las televisiones autonómicas españolas y buena parte de las europeas trabajan con las empresas locales en base diferentes sistemas de acuerdos y convenios con mínimos contratación establecidos que han ido aumentando progresivamente en los últimos años debido al mayor desarrollo y la reducción paulatina de la atomización de este sector empresarial, que optado por aunar esfuerzos y know how mediantes clusters y uniones de empresas.
Sin embargo, denuncian que el sistema de contratación de RTVC “es actualmente único en el territorio nacional, vive de espaldas al sistema productivo empresarial y realiza contratos arbitrarios, carentes de normas y garantías que han amparado y fomentado la creación de empresas que, pese a carecer de trabajadores ni medios tecnológicos, han logrado contratos millonarios y cuya última andanada ha sido el desvío de 3,5 millones de euros de fondos europeos, que debían destinarse al fomento del sector audiovisual y que, sin embargo, han ido a parar a la RTVC sin ningún tipo de contrato programa ni cortapisa a una situación en la que ”no se respeta la libre competencia“.
El Cluster Audiovisual Canario no duda en asegurar que RTVC “está hundiendo a las productoras locales, al tiempo que, lamentablemente, se ha optado por un modelo de producción absolutamente contrario a la realidad canaria que difiere profundamente de los principios básicos para los que fue creada como motor de cohesión de un territorio fragmentado y acercamiento de los principales acontecimientos a todos los canarios”.
La mayoría de las comunidades autónomas tienen el audiovisual como un sector estratégico y desarrollan importantes políticas para su promoción. Por eso, durante los últimos años se han sucedido las publicaciones de diferentes libros blancos y programas de desarrollo que tienen un elemento común fundamental: la importancia de las televisiones autonómicas como “motores” de la industria en sus respectivas comunidades.
Esos planes han ido acompañados además de una mayor dotación de recursos y de una importante diversificación de los mismos. Se ha facilitado el acceso de las empresas a créditos blandos, se han intentado atraer fondos de capital riesgo, aumentar la participación de las sociedades garantía recíproca, y se ha ayudado a las empresas a mostrar sus trabajos en los mercados internacionales.
El Cluster Audiovisual explica que todos los planes de desarrollo en las comunidades autónomas tienen a las televisiones como uno de sus ejes fundamentales porque éstas, al menos en un principio, son también el principal y, en muchos casos único, consumidor de los productos locales. Esto genera una grave situación de dependencia por parte de las productoras que, en el caso de Canarias, se encuentran con un ente, RTVC, cuyas arbitrariedades bloquean una pieza fundamental para el sector: la innovación que precisa estabilidad y libre competencia a la hora de acceder a las contrataciones, aunque comunidades como Cataluña, Galicia, País Vasco y Valencia no tengan reparos en decretar, por sistema, porcentajes de reserva para las empresas locales en base, precisamente, a la necesidad de su potenciación y a su mejor conocimiento de la realidad cultural y sociológica de la realidad de sus territorios.
