Investigadores de la ULL ligan la creatividad a la superdotación intelectual
Un equipo de investigación de la Universidad de La Laguna (ULL), liderado por el profesor Juan E. Jiménez, de la Facultad de Psicología, acaba de publicar en la Revista Española de Pedagogía los resultados de un estudio realizado a 634 niños canarios desde 1º de Primaria hasta 4ª de la Enseñanza Secundaria Obligatoria, gracias al cual se ha podido determinar que la creatividad es uno de los elementos que caracterizan la superdotación intelectual, informa la ULL.
Jiménez es desde 2002 asesor científico de la Dirección General de Ordenación e Innovación Educativa de la Consejería de Educación del Gobierno de Canarias, para la cual ha ayudado a desarrollar varios programas destinados a niños con necesidades educativas específicas. Uno de ellos se refiere a la detección temprana de la precocidad intelectual, lo que comúnmente se ha dado en llamar “niños superdotados”.
Para diagnosticar este tipo de casos, lo usual es calcular su coeficiente intelectual (CI) mediante un test. Sin embargo, para Jiménez, este valor numérico resulta muy limitado para caracterizar correctamente el tipo de inteligencia que posee cada individuo. Por ello su equipo ha diseñado un nuevo sistema de detección de los niños superdotados que, entre otras novedades, se basa en una concepción más compleja de lo que es la inteligencia.
Existen ''inteligencias múltiples''
Este nuevo modelo ofrece una visión multifactorial de la inteligencia, hasta el punto de que Jiménez considera que se puede hablar de “inteligencias múltiples”. Así, existen varios campos de competencia como el verbal, el artístico o el matemático, de los cuales unos pueden estar más desarrollados que otros. De este modo, un superdotado sería aquella persona que mostrara valores altos en absolutamente todos estos campos. Pero además, a ello hay que sumar la creatividad.
En el estudio se ha observado que tantos los superdotados como los talentos creativos se caracterizan por una mayor creatividad en comparación a los alumnos que no presentan altas capacidades. Es decir, los superdotados son muy creativos, y por tanto la creatividad debe considerarse un elemento más de los que caracterizan a los niños con altas capacidades intelectuales.
Este dato conviene matizarse: puede haber una persona muy creativa, pero que no tenga valores notables en las áreas de competencia de la inteligencia. O, a la inversa, una persona con altos grados en esas áreas, pero que no posea mucha creatividad. En esos casos, se puede hablar de una persona creativa o muy inteligente, respectivamente, pero no de superdotado, ya que para poder ser considerado de tal modo se debe poseer altos ambos niveles.
La creatividad se mide siguiendo el modelo de investigadores como Torrance
La creatividad se ha medido siguiendo el modelo de investigadores como Torrance, adaptándolos al contexto cultural y lingüístico canario. Se han creado materiales de evaluación de la creatividad tanto verbal como figurativa para que los orientadores escolares puedan evaluar la creatividad de los alumnos. Para ello se utilizan tests en los que se pide al estudiante que realice un dibujo a partir de uno o dos trazos dados, y se evalúan parámetros como la fluidez, la originalidad, la elaboración o la flexibilidad.
A los niños detectados que son identificados con precocidad intelectual en toda Canarias se les imparte luego una serie de talleres de enriquecimiento extracurricular en los que se trabaja con ellos la creatividad durante un curso escolar.
Para Jiménez, esta aproximación a la inteligencia considerándola un elemento multifactorial supera claramente al modelo tradicional basado en el uso del CI, ya que este resulta poco descriptivo y no sirve para diferenciar a un individuo de otro. En cambio, con el análisis de las diferentes áreas de la inteligencia, se pueden desarrollar medidas específicas para suplir las carencias y potenciar los puntos fuertes de cada niño. El modelo resulta muy novedoso y pionero en España, y comunidades como la catalana ya han mostrado su interés por experimentarlo.