El showman grancanario Guillermo 'Fantástico' González falleció el martes en Madrid tras una vida de éxito en la televisión venezolana

El grancanario Guillermo Fantástico González, que triunfó en Venezuela como el rey de la televisión, falleció el pasado martes en Madrid a los 75 años tras sufrir una rápida enfermedad que acabó con su vida en pocos meses. Guillermo José Manuel González Regalado, que así era su nombre completo, era conocido como Guillermo Fantástico González, precisamente al tomar el nombre de uno de los programas con los que triunfó en la televisión venezolana: Fantástico.

Su vida fue realmente fantástica, pasando desde sus humildes orígenes isleños hasta la cima de la televisión latinoamericana, donde fue un monstruo de la comunicación, en el mejor sentido de la palabra. A su éxito profesional unió un carácter amable y afable que le granjeó la amistad y las excelentes relaciones con su público, que lo quería incondicionalmente, y con relevantes personalidades públicas y famosos del mundo artístico de la farándula.

Guillermo había nacido en Las Palmas de Gran Canaria el 8 de junio de 1945 y falleció en Madrid el 30 de junio pasado, donde se había refugiado tras salir de Venezuela y Miami. Actor, productor, empresario y animador, escribió y protagonizó capítulos gloriosos de la televisión venezolana durante varias décadas, desde los años 60 en los que comenzó su andadura profesional este pionero del medio audiovisual.

Fantástico González nació en Las Alcaravaneras en el linde con el barrio de Los Arenales hace 75 años. De pequeño lo llamaban Manolín, aunque Manuel era su tercer nombre. Hasta que no pisó tierra venezolana cuando niño no se enteró de que su primer nombre era realmente Guillermo. El colegio La Salle fue el centro donde estudió de pequeño.  

Antes de cumplir los 7 años viajó con sus padres a Tenerife, donde se asentaron en La Orotava ya que allí tenía su abuelo materno una finca, aunque también vivió en Santiago del Teide.

El 24 de diciembre de 1953 el niño Manolín, que aún no sabía que iba a convertirse en Guillermo Fantástico González unas décadas después, salió con su madre Carmela Regalado desde el puerto de Santa Cruz de Tenerife en un transatlántico llamado Franca C. El 5 de enero de 1954 el barco atracó en el puerto venezolano de La Guaira. En aquella época gobernaba Venezuela el dictador Marcos Pérez Jiménez.

Este canario noble e ilustre fue en Venezuela presentador, actor y empresario que destacó por batir barrios récords de audiencia con el programa Cuánto vale el show, emitido en los años 80. Además, fue el primer productor independiente de Venezuela ya que produjo y dirigió series entre 1964 y 1976. 

Fue un reconocido animador y showman, además de gestionar y ser propietario de diferentes empresas del mundo de la comunicación. Apadrinó a muchos artistas venezolanos y de otros países de Latinoamérica.

Estudió Arquitectura en la Universidad Central de Venezuela y también cursó estudios de artes escénicas. Se estrenó como actor teatral en 1962 y los productores que se lo rifaban lo contrataron dos años después para trabajar en la primera telenovela que se hizo en Venezuela: Historia de tres hermanas. Posteriormente participó en otras telenovelas que transmitía Radio Caracas Televisión.

Siguió su carrera en México, donde trabajó en la actual Televisa, antiguamente denominada Tele Sistemas Mexicanos. Allí recibió el premio como Mejor Actor en 1967.

Regresó a Venezuela y continuó trabajando en Radio Caracas Televisión. En 1970 comenzó el programa de concursos Viva la juventud, donde debutó como animador junto a Carmen Victoria Pérez. En 1979 inició el programa sabatino Fantástico, que era un maratón de variedades, en Radio Caracas Televisión. Del nombre de ese programa tan exitoso le vino su sobrenombre para siempre: Guillermo Fantástico González.

Dentro de ese programa que le dio tanto éxito en Latinoamérica, creó la sección Cuánto vale el show en 1980, un concurso en el que competían artistas aficionados frente a un jurado. José Luis Rodríguez El Puma fue uno de los cantantes que pasaron por ese espacio y se dieron a conocer tras el impulso de ese trampolín mediático presentado por Guillermo.

En 1974 compró el teatro Chacaíto y tres años después abrió Chacaíto II, los dos teatros comerciales más importantes de comedia en Venezuela. Posteriormente fundó Televen y creó su propia productora para emitir durante tres años su programa en Venezolana de Televisión, el canal público de Venezuela.

Más adelante este emprendedor fundó Televisa Canal 7 en Maracaibo y también creó quince emisoras de radio. En la isla de Margarita estableció el Banco de Canarias, del que fue accionista y director. Cuatro años después vendió sus acciones y se fue a Venevisión, canal donde produjo varios programas de éxito. Se convirtió en un experimentado asesor para levantar canales de televisión en Perú, Colombia, Chile, República Dominicana y Estados Unidos, más concretamente en Miami, en el estado de Florida.

El cantante andaluz Bertín Osborne, que también fue muy amigo suyo tras conocerse en sus giras por Latinoamérica, ha mostrado estos días en redes sociales su desolación por la desaparición de este canario universal que también trabajó en Telemundo, la televisión de Miami.

Fue un claro opositor al régimen de Hugo Chávez, por lo que abandonó Venezuela para irse a vivir a Madrid junto al estadio Santiago Bernabéu, ya que era un gran aficionado del Real Madrid. Fue amigo de grandes personalidades del mundo económico, político y cultural, como los empresarios Salomón Cohen y Francisco Hernando el Pocero, la familia Cisneros o el periodista Pepe Oneto, que se lo presentó el articulista tinerfeño Andrés Chaves.

Tuvo una hija, Guillermina, que vivió en Londres, pero logró que se trasladara a Madrid para poder estar sus últimos meses de vida con ella y sus nietos. Su propia ex mujer y madre de Guillermina, Bader, también estuvo acompañándolo en los últimos momentos. Sentimentalmente estuvo unido a la venezolana Gloria Valderrama tras su separación.

Fue un hombre que tenía muy buen humor y se preocupaba por todos sus amigos. Guillermo viajaba en su propio avión, que puso a disposición del Gobierno de Canarias de manera gratuita cuando ocurrió la tragedia en Vargas. En junio de 2014 Guillermo regresó a su isla natal, 58 años después, por invitación expresa del presidente del Gobierno de entonces, Román Rodríguez. 

Guillermo, que era caballero barón de la casa real de Trastámara, fue un coleccionista de coches de lujo y cuadros de Botero. Fue siempre un emprendedor y trabajador infatigable, además de un hombre bueno y generoso con todos los que le rodeaban. Tenía la doble nacionalidad española y venezolana. Fue un hombre popular y noble, muy amigo de sus amigos. Hombre bondadoso, todo él era pura bonhomía.

Mantuvo vínculos empresariales con Binter y con la compañía aérea venezolana Santa Bárbara, además de con el Banco de Canarias en Venezuela. Vivió en Canarias, Venezuela, Miami y finalmente Madrid.

Guillermo fue una figura esencial en los años más exitosos de la televisión venezolana, donde mostró su talento y promocionó el de otros artistas que se dieron a conocer en sus programas. González fue pionero en el formato del concurso de canto. Sus programas fueron claros precedentes de concursos musicales de éxito internacional como La Voz o Factor X, que triunfaron en todo el mundo.

Este showman de origen canario también era conocido como Rolo e' vivo, al tomar el nombre de uno de sus programas más exitosos. Todo lo que tocaba lo convertía en oro y por eso hizo que Venezuela gozara con él de los mejores años dorados de los espectáculos televisivos. La televisión venezolana está hoy huérfana de su padre más querido, al que siempre adoró y con seguridad seguirá añorando por muchos años, aunque el recuerdo de Guillermo será difícil de olvidar y seguirá indeleble durante mucho tiempo.