La Ospar fracasa en su intento de proteger un área marina del Ártico
El Convenio Ospar, sobre la protección del medio ambiente marino del Atlántico Nordeste, no ha logrado acordar esta semana en Tenerife la creación de un área marina protegida en el 10 por ciento del Ártico por la oposición de los países más cercanos a este enclave, Islandia, Noruega y Dinamarca, según ha informado la jefa de la delegación española en la Comisión OSPAR, Ainhoa Pérez, al término de la reunión anual.
Así, Pérez, ha explicado a Europa Press que se ha producido una “división de opiniones” de los países ribereños del Ártico -Islandia, Noruega y Dinamarca- y “solo” se ha acordado “reforzar” los contactos con el Consejo Ártico, que es un acuerdo diplomático que incluye también a países como Canadá, Estados Unidos o Rusia, ya que estos consideraban que ese debe ser el foro de discusión.
“No ha habido acuerdo sobre la declaración de un área marina protegida en aguas fuera del Ártico, a pesar del esfuerzo importantes de algunas partes contratantes, como España, entre otros, que teníamos una mayor ambición y pensábamos que Ospar debe dar pasos decididos en esa dirección”, ha lamentado Pérez, también directora técnica de la división para la protección del mar en Magrama.
Además, duda de cómo se podrá avanzar en la colaboración con el Consejo Ártico y ha adelantado que algunas partes contratantes propondrán que se vuelva a incluir este reto en la próxima reunión anual de OSPAR en 2017.
Sin embargo, ha admitido que las partes intentan ser positivas y pensar que “al menos se abre una vía de colaboración”, pero ha subrayado que España defendía que OSPAR tuviera un papel “más protagonista” en la declaración de áreas marinas protegidas, no solo en el Ártico “pero muy especialmente y también en el resto del atlántico”.
Asimismo, ha recordado que la aspiración es proteger un 10 por ciento del área marina mundial y, hasta ahora, el área de OSPAR en el Ártico tiene solo un 2 por ciento de sus áreas protegidas pero dentro de la jurisdicción de los Estados.
Greenpeace lamenta el fracaso
Sobre el resultado de la reunión, la organización Greenpeace ha lamentado que el “apoyo mayoritario” en Ospar ha sido sin embargo “insuficiente” para proteger un área del Ártico y ha puesto en evidencia que Noruega, Dinamarca e Islandia “se quedan solos” en su posición.
Además, ha reivindicado su trabajo y campañas por la protección del Ártico, que han estado en el centro de Ospar y considera que la posición de Greenpeace ha logrado “un posicionamiento mayoritario y contundente en su favor” frente a países como Noruega, que sigue dando permisos de perforación petrolera en sus aguas.
La ONG denuncia que Noruega, Dinamarca e Islandia han bloqueado todos los intentos de llegar a un acuerdo que habría ayudado a mantener una de las zonas más delicadas y frágiles del mundo jurídicamente protegida y fuera de los límites a las industrias destructivas.
La representante de la delegación política de Greenpeace en Ospar, Sara del Río, ha criticado a estos tres países por evitar un resultado positivo y el mandato de Ospar era claro, por lo que “no había justificación para retrasar su protección”.
Sin embargo, la ONG ha anunciado que seguirá con su campaña mundial para salvar el Ártico y exige de nuevo a los estados del Ártico y de la comunidad internacional que protejan el Ártico de las industrias destructivas, con la creación de un santuario en las aguas internacionales alrededor del Polo Norte.