En la búsqueda del patrimonio que la mujer castellanomanchega ha dejado en la música

Las mujeres en la música se conocen todas. Porque son tan pocas, explica Elena Martínez, que es inevitable saber quién es quién en una escena musical como la conquense. Y hablamos de la provincia. Fue a partir de estos círculos tan pequeños que se conocieron Marta Aparicio y Elena Martínez, las impulsoras del proyecto 'Her itage', un juego de palabras que mezcla el 'her', ella, con 'heritage', patrimonio. El dúo musical, pero también investigador y divulgador cultural, busca precisamente ese patrimonio que parece perdido, el de las mujeres que han dejado su huella en la música y, por tanto, en el folclore, las tradiciones y la memoria castellanomanchega.

En este proyecto de recuperación del patrimonio musical, son las mujeres las protagonistas, ya sean compositoras o intérpretes. La música, explica Elena, es “una de las industrias con el mayor techo de cristal” dentro de la cultura. “Esto surge como una formación y una respuesta de visibilización del papel que cumplen y que han cumplido”, recalca. En esta iniciativa, que es la ocupación principal de ambas protagonistas, los principales valores son la igualdad, el arte, la música y también la igualdad de género. Este viernes participan en la apertura de la temporada cultural primavera-verano en Natura Restaurante y Bistró. También tocarán en la caseta de los estudiantes del campus de la UCLM de Cuenca, como una presentación más oficial del conjunto.

Pero lo que quieren realmente es ayudar a crear red y comunidad en torno a los valores que defienden. Es como parte del proyecto que también liderarán una serie de talleres en ayuntamientos que, por ahora, se encuentran en la provincia de Cuenca. También quieren llevar a cabo una investigación que profundice en el origen de tradiciones conquenses y en lo que ha significado la presencia femenina en el panorama musical de la región. Pero para eso todavía se debe esperar.

“Hacemos talleres de música popular para mujeres, sobre todo en zonas rurales, en pueblos muy pequeños de unos mil habitantes”, explica Elena. Es el principio de la aventura formativa que quiere incluir más aspectos de la creación creativa. “Se trata de recuperar 'lo viejo', pero sin olvidar los géneros nuevos que por ahora ni siquiera cuentan con formación todavía”, explica Elena. Además, reflexiona acerca de la importancia de que sean mujeres las que protagonicen este tipo de iniciativas, debido a la infrarrepresentación que el género sufre en este tipo de aspectos.

Por último quieren dedicarse también a la investigación pura, por lo que se han presentado a la convocatoria de ayudas a la investigación del Instituto de la Mujer. La propuesta es crear un mapa de la situación de las mujeres en la región, cómo se han ido organizando los distintos colectivos en los diferentes roles que pueden tener dentro de la industria musical castellanomanchega. “Esto nos servirá para hacer una aproximación, pero también para poner este tipo de temas en la agenda pública. Queremos que esto tenga muchos años de recorrido y crear redes de mujeres en torno al arte y que surjan iniciativas para vertebrar el papel de la mujer en estas épocas”, recalca Martínez.

La falta de reconocimiento social del propio folklore es algo peligroso

“Existe un profundo desconocimiento respecto al papel que han tenido las mujeres en la cultura. Ha habido iniciativas, como la de las 'Femirockers'. Esta fue la primera que conocimos a nivel regional, pero en el aspecto científico no existe nada todavía. Hay estudios, pero son todos a nivel nacional y con marco teórico internacional, y asociaciones de mujeres en la música, pero al final no hay a nivel regional. Y esto con todos los matices que comprende una región, y que finalmente quedan de lado. La falta de reconocimiento social del propio folklore, que no ocurre en otras zonas como Valencia, es algo peligroso y este desconocimiento no tiene en cuenta las características propias de Castilla-La Mancha”, reflexiona Elena.

Para ello, llevan meses trabajando, bien a través de las ayudas públicas, bien con sus medios propios. A través de ayudas para el asociacionismo de mujeres, por ejemplo. “Estamos construyendo de cero, pero está teniendo una buena acogida, trabajando mucho la comunicación y la divulgación para llegar a más instituciones y organizaciones, ya sean públicas o privadas”, señala.

En cuanto a sus conciertos, recalca que van “casi en orden cronológico”, interpretando canciones que mujeres como Conchita Piquer y 'La Argentinita', hasta Blondie, Amy Winehouse o Gloria Geynor. “Queremos recuperar nuestro patrimonio más antiguo, pero también ir a la nuevo y hacer nuestras las canciones que a lo mejor a veces están más estigmatizadas, como la copla, por lo que representa. También queremos poner de relieve géneros musicales que no han tenido tanta tradición en la región, como pueden ser el jazz o el funk. Vamos a todos los estilos”, reflexiona.

En cuanto al origen de 'Her itage', Martínez explica que las dos son “mujeres de pueblo, mujeres rurales y orgullosas”. “Nos conocimos a través de las jam session que se organizan en el casco antiguo de Cuenca”, recuerda. ¿Cuántas mujeres se llegaron a subir a ese escenario? “Pues en los muchos años que llevamos, habremos subido tres o cuatro”. Por eso hablaron y decidieron que “tenían que hacer algo, algo de mujeres”. Entonces, las llamaron desde el Museo Paleontológico, hicieron un dúo, disfrutaron la experiencia y comenzaron a compartir sus inquietudes, que son muy diversas. Inclusión, diversidad, desarrollo rural y social a través de la música y de las artes. “Este es nuestro proyecto prioritario”, recalca.