Flores y un memorial para recordar a los conquenses víctimas del nazismo

elDiarioclm.es

María Valverde —

0

Los conquenses que fueron deportados a los campos de concentración nazis, muchos de los cuales murieron allí, cuentan ya con un memorial que los recuerda en el paseo del Huécar de Cuenca.

El alcalde, Darío Dolz, el concejal de Cultura, Miguel Ángel Valero, y la portavoz de Cuenca en Marcha!, María Ángeles García, han descubierto este sábado el monolito de piedra donde se han inscrito los nombres de los 99 represaliados (65 de ellos fallecidos, dos desaparecidos y 32 supervivientes) para preservar su memoria y recordar su historia. 

El acto, sencillo pero muy emotivo, ha sido conducido por el periodista Jesús Huerta y ha contado con el testimonio de varios familiares de las víctimas y con la actuación del cantautor Luis Pastor y del músico conquense Perico Krak. 

Jesús Huerta ha puesto de manifiesto el ostracismo al que han estado condenadas sus historias, un silencio fruto del miedo “a hablar de política” y del olvido. Ahora ese silencio se ha roto y las familias, aliviadas, han podido tener el homenaje que han perseguido durante años.

Sufrimiento y espera. Han sido las palabras más repetidas en las intervenciones de los seis parientes que han participado en el acto y de los representantes de la Asociación Recuperación Memoria Histórica, Ciudadanos por la República de Cuenca y La Gavilla Verde.

Darío Dolz ha asegurado que hoy se ha cumplido “con la deuda moral de reconocer y recordar a los conquenses que lucharon por la libertad social y fueron víctimas de un genocidio atroz”.  

Ha destacado que solo se ha cumplido con la mitad de la moción aprobada en el Ayuntamiento. Fue presentada por el grupo municipal 'Cuenca, en Marcha!' para erigir un memorial en recuerdo de los conquenses deportados a los campos de concentración nazis y también para comenzar su nombramiento como hijos predilectos y adoptivos, en el caso de que no hubieran nacido en Cuenca, de la capital conquense. La moción, que se presentó a finales de septiembre del 2019, salió adelante gracias a los votos del PSOE, con trece concejales y la única concejala de Cuenca, en Marcha!, María Ángeles García.

Este sábado Dolz ha anunciado que estos conquenses recibirán la declaración de hijos adoptivos. “Será una primeras cosas que haremos al inicio de esta de esta legislatura”, ha añadido, en alusión al nuevo periodo de cuatro años que comenzará el sábado 17 de junio, una vez queden constituidos los ayuntamientos tras las elecciones municipales del pasado 28 de mayo.

La portavoz de Cuenca en Marcha! ha dedicado unas palabras a los asistentes, según recoge Las Noticias de Cuenca. “La memoria recuperada por los conquenses que dieron su vida por la libertad debe constituir una lección ejemplar sobre lo que no nunca más debería ni debe ocurrir”, ha subrayado.

Miguel Ángel Valero ha asegurado que “la tiranía jamás se puede imponer”, ha afirmado con rotundidad y ha asegurado que la única manera de combatirla es a través de la educación. También ha remarcado que Cuenca es una ciudad “que cuida a los luchadores de la libertad”. 

Detrás del atril han pasado los conquenses que han luchado por indagar, con la ayuda de los investigadores Ana Esteban y Herminio Lebrero, la cruda realidad de sus antepasados para sacarlos a la luz tras un largo tiempo en el cajón del olvido. Los discursos han entremezclado la poca historia que les ha llegado al presente de sus familiares, la poesía que les han escrito para ellos, cómo les conocieron y el silencio que han vivido sus vidas. A pesar de toda la oscuridad contenida en sus experiencias en los campos de concentración, sus familiares las quieren compartir con “orgullo”, según relata en su crónica María Valverde. 

Después de días de calvario, los pocos que sobrevivieron fueron liberados, un momento que supuso la llegada de la paz tras la tormenta. Así lo recoge el juramento de Mauthausen. “Al fin las puertas de uno de los campos más terribles y más sangrientos se abren. Partiendo en todas las direcciones, volveremos libres a nuestros países liberados del fascismo”, rezan las primeras líneas. 

Los parientes de Eulogio Martínez, Alfredo Ruescas, Fortunato Cañego, Manuel Azaustre y Dositeo Moreno han reflejado el dolor de la espera de los allegados más cercanos a estas víctimas y han rememorado cómo la vida se les paralizó. Uno de estos testimonios lo ha trasladado Miguel Ángel Cubillo, familiar de Fortunato Cañego, que un día cruzó las fronteras del país para nunca volver. Él era el tío abuelo de Cubillo, que hoy ha homenajeado su memoria. Fortunato nunca contó detalles sobre su reclusión en los campos de concentración de Mauthausen, Gusen y Dachau, en los que estuvo 1.554 días. “Las historias de la guerra no se contaban por el miedo”, ha afirmado Cubillo. “El silencio de la deportación a los campos nazis fue uno de los más grandes”, ha concluido. 

A las palabras y a las poesías le ha seguido la música del cantautor Luis Pastor, que ha amenizado la ofrenda floral de los parientes en el monolito. Después de colorear con flores la memoria de las víctimas del nazismo, Pastor arrancó una última canción a cappella, `Mariposas´, una melodía que se ha fundido con el improvisado coro de los familiares.