Los Servicios Epidemiológicos de la Junta de Castilla y León en Ávila han declarado un brote de la COVID-19 localizado en una residencia de personas mayores en la zona básica de salud de Candeleda (Ávila), con 52 positivos, de ellos 51 residentes y un trabajador.
Según la Delegación de la Junta, dentro de este brote hay dos personas hospitalizadas (en Ávila y en Talavera de la Reina) y 13 han presentado síntomas, mientras que el resto son asintomáticos.
El número de contactos en seguimiento es de 97, de ellos 27 residentes y 60 trabajadores.
La Junta ha apelado a la “responsabilidad individual y colectiva de los ciudadanos”, cumpliendo las medidas básicas de distancia social, higiene de manos y uso obligatorio, con carácter general, de la mascarilla en vías públicas, ámbitos urbanos al aire libre y espacios cerrados de uso o abiertos al público, con el fin de evitar situaciones que pudieran suponer riesgo de contagios y rebrotes de la enfermedad.
En Zamora también se ha declarado un brote que afecta a 8 personas con resultado positivo en las pruebas PCR.
El nuevo brote está relacionado con una reunión de tres familias en el municipio zamorano de Justel, y en el que alguno de sus miembros viajó desde Benavente y otras Comunidades Autónomas (Portugalete y Castro Urdiales). Todos ellos están recibiendo el seguimiento epidemiológico pertinente, así como las precauciones sanitarias necesarias. Asimismo, uno de los casos se encuentra, en este momento, hospitalizado.
La Dirección General de Salud Pública, a través del Servicio Territorial de Sanidad en Zamora mantiene la vigilancia y el control epidemiológico de los brotes tanto en la capital como en la provincia. Esto se hace a través del seguimiento de casos y de las correspondientes encuestas de contactos e investigación de las relaciones sociales de estas personas, tanto en sus entornos familiares como sociales y laborales.