La Generalitat ha levantado la obligatoriedad del teletrabajo, tanto para empresas públicas como para las privadas. En una reunión este viernes, el Procicat, el organismo que gestiona la pandemia, ha decidido alargar el grueso de las medidas restrictivas una semana más, debido al repunte de contagios, pero a la vez ha recomendado que las empresas fomenten la reincorporación progresiva a los puestos de trabajo.
La decisión supone que, a excepción del teletrabajo, buena parte de las restricciones, hoy mucho más laxas que en los picos de la pandemia, se alarguen al menos hasta el 12 de julio. El conseller de Salud, Josep Maria Argimon, ha expresado su preocupación ante el gran repunte de contagios que se ha registrado en los últimos días, en que las cifras diarias se han multiplicado por diez en una semana.
En estos momentos, las restricciones se limitan a aforos reducidos en la hostelería y los comercios y distintos protocolos para actividades culturales, deportivas o de ocio nocturno. Las discotecas abrieron el pasado 21 de junio y tenían quince días iniciales de prueba, que por ahora han superado. Aunque Agrimon ha abierto la puerta a revisar protocolos para introducir tests rápidos.
En cuanto al teletrabajo, la Generalitat ha avalado la vuelta a los puestos presenciales que criticaban los sindicatos, aunque con matices. “La resolución recomienda a los titulares de los centros de trabajo, públicos y privados, que adopten medidas para la reincorporación progresiva de forma presencial”, señala el comunicado, aunque añade que deberán “fomentar el uso del teletrabajo cuando sea posible por naturaleza de la actividad”.