“Llegamos a urgencias el miércoles a las 6.00 de la mañana y desde las 20.00 horas de la tarde hasta las 13.30 horas de este jueves hemos estado esperando en la sala de preingresos a que se quedara libre alguna habitación para ingresar en planta”.
Así se ha relatado J. Ll., el vía crucis que ha vivido en el hospital Clínico de València para poder ingresar a su madre, de 76 años, por una insuficiencia respiratoria. En total, 17 horas y 30 minutos de espera.
Según explica, “junto a ella, que estaba en una cama, había otra docena de pacientes en camas en un habitáculo creado para preingresos que antes era una sala de espera en la que casi no quedaba sitio para que pasaran los médicos, enfermeros y enfermeras”.
Al respecto, fuentes de la Conselleria de Sanidad han reconocido que estos días se ha incrementado la presión asistencial en las urgencias, especialmente por parte de personas de avanzada edad con problemas respiratorios derivados del descenso de las temperaturas, si bien han asegurado que a lo largo de la tarde de este jueves todos los pacientes en preingreso o en urgencias a la espera de habitación irían pasando a planta de forma progresiva.
Al mismo tiempo, han destacado que las salas de preingreso cuentan con camas y personal sanitario.
Las mismas fuentes han afirmado que los hospitales con más problemas en este sentido han sido La Fe, el Clínico y el General de València, así como los de Xàtiva y Alzira.
Sin embargo, en el resto de hospitales de la provincia valenciana, así como en los de las provincias de Castellón y Alicante, pese a que también está habiendo picos de demanda, existe de momento disponibilidad de camas, según han informado desde Sanidad.