La prioridad peatonal según el PP y Vox en València: dejar carriles bici en las aceras y llenar de buses la plaza del Ayuntamiento

“El peatón va a ser el eje de la movilidad en este mandato”. Así se han pronunciado en más de una ocasión la alcaldesa de València, María José Catalá, y el concejal de Movilidad, Jesús Carbonell.

Sin embargo, en la práctica no es lo que se está apreciando en los primeros meses de mandato del PP y Vox al frente del Ayuntamiento. Uno de los ejemplos más claros es el proyecto de renovación de aceras del Puente de Aragón que pretendía bajar el carril bici a la calzada, por no hablar del desvío de cinco líneas de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) por eje de la calle de la Paz, Sant Vicent y plaza del Ayuntamiento, zonas repletas de viandantes por las diferentes peatonalizaciones acometidas en el entorno.

La primera de las actuaciones surgió de los presupuestos participativos Decidim VLC el pasado mandato con Compromís y el PSPV al frente del Gobierno municipal y que consistía en instalar nuevas baldosas en el Puente de Aragón y también en bajar a la calzada el carril bici, ocupando uno de los cuatro carriles de circulación del puente en sentido al centro. De esta forma, se daba mayor seguridad tanto a ciclistas como a viandantes, evitando que entraran en conflicto y dando mayor espacio al peatón para pasear.

El nuevo equipo de Gobierno de derechas y de extrema derecha, sin embargo, ha modificado el proyecto para habilitar un carril bus en el espacio en el que se iba a adecuar el carril bicii y ha vuelto a pintar un ititnerario ciclista sobre las nuevas baldosas instaladas en la acera.

En las propias fotos compartidas por el perfil oficial de X (antes Twitter) del Ayuntamiento de València se aprecia el reducido espacio que queda para los peatones, lo que hace que invadan el carril bici.

El exconcejal de Movilidad y actual edil de Compromís, Giuseppe Grezzi, se ha mostrado muy crítico con esta situación en sus redes sociales: “Las consecuencias de volver a pintar un carril bici en la acera en lugar de bajarlo a la calzada: gente andando en el carril, bicis pedaleando en la calzada”.

Esta actuación abre la puerta a mantener en las aceras otros carriles bici que el anterior ejecutivo de izquierdas había proyectado bajar a la calzada, como por ejemplo el de la avenida del Puerto, calle Cuba o el tramo de Blasco Ibáñez entre la avenida de Aragón y Viveros.

La supuesta priorización del peatón que promulgan Catalá y Carbonell también se contradice con la reintroducción de 600 autobuses al día en la plaza del Ayuntamiento de València por la que volverán a entrar cinco líneas de la EMT a partir del 12 de diciembre, justo de cara a unas fechas en las que más aumenta la movilidad peatonal por el centro.

Hasta ahora solo entraba por el eje de la calle de la Paz y San Vicente la C1, un itinerario tomado literalmente por miles de viandantes desde que el anterior ejecutivo municipal peatonalizara la plaza del Ayuntamiento, la del Mercat y la de la Reina.

Ya el pasado viernes 1 de diciembre se dieron problemas durante el acto de encendido de luces navideñas cuando los peatones tomaron la plaza, quedándose atascados los autobuses entre la multitud, una situación que repitió este miércoles 6 de diciembre, lo que obligó a desviar la línea C1 por la calle Poeta Querol, al estar repleta de viandantes la calle San Vicente, entre la plaza del Ayuntamiento y la de la Reina, como demuestran las imágenes que compartió en sus redes el concejal socialista, Borja Sanjuán.

En este sentido, los sindicatos de la empresa pública con representación en el comité de empresa han manifestado su preocupación ya que consideran que no se dan las condiciones de seguridad necesarias para meter tantos autobuses por estos espacios repletos de viandantes, especialmente en periodos festivos, por lo que han encargado a sus servicios jurídicos que estudien si es factible plantear una denuncia para obligar al Ayuntamiento a que adopte medidas adicionales que garanticen la seguridad de los conductores, de los viajeros y de los peatones.

Carbonell se escuda en “la recuperación del espíritu navideño”

El concejal de Movilidad, Jesús Carbonell, descartó este jueves aplazar la remodelación de líneas hasta después de Navidad, aunque dijo que los días de máxima afluencia se volverá a desviar el tráfico por Poeta Querol a partir de las 17.00 horas. Además, afirmó que “presumiblemente no tiene por qué haber problemas porque ahora con la remodelación de líneas van a pasar unos 550 buses diarios” por el eje de la calle de la Paz, San Vicente y plaza del Ayuntamiento “cuando anteriormente pasaban unos 900 durante cerca de 40 años”, esto es, antes de que se peatonalizaran las plazas de la Reina, del Mercat y del Ayuntamiento.

Según Carbonell, “durante ocho años ha habido un apagón navideño que ahora se ha recuperado, se ha creado un itinerario que va desde las plazas de Manises, de la Virgen, de la Reina, pasa por la calle San Vicente y llega a la plaza del Ayuntamiento y la consecuencia de todo ello es una presencia masiva de ciudadanos que han visto la oportunidad de recuperar el espíritu navideño que no han tenido en ocho años”. Por lo tanto, “es una circunstancia excepcional como pueden ser las Fallas, el Maratón o cualquier acontecimiento que cuando se produce lo normal es cortar el tráfico donde hay mayor presencia de ciudadanos”.

Según el edil, “la oposición está nerviosa porque estamos adoptando decisiones importantes en movilidad de la mano de comerciantes y vecinos y tenemos una EMT que va a tener en 2024 el presupuesto más alto de su historia, que va a comprar 57 autobuses en 2024, que se recupera la vida en en centro de la ciudad y va a redundar en una mejora del transporte público en la ciudad, como ya estamos viendo con un récord histórico de 400.000 usuarios diarios”.

Críticas de Compromís y PSPV por el atasco de la C1

El concejal de Compromís Giuseppe Grezzi, exedil de Movilidad, tachó lo sucedido este miércoles de “fiasco anunciado” y se preguntó, en redes sociales: “¿Si han desviado una línea por aglomeraciones de gente, cómo podrán pasar más de 600 autobuses a partir del 12 de diciembre?”.

“Entendemos que para los votantes del PP que creyeron e hicieron suyas todas las críticas a nuestra gestión de los últimos 8 años, ver ahora como Català y su equipo despliegan una acción tan insensible con los peatones y el patrimonio de la ciudad, al tiempo que indefendible técnicamente, debe ser una decepción absoluta. Los demás, es cierto que igual no esperábamos ningún alarde de Català, pero romper lo que está bien hecho e iniciar una guerra a la movilidad sostenible como la que están planteando, sin mantener ningún diálogo con la sociedad y sin contar con ningún aval ni informe técnico, es impropio de ningún político mínimamente serio y responsable. València no se merece esto”, dijo Grezzi

En la misma línea, la portavoz del PSPV, la exvicealcaldesa Sandra Gómez, señaló que “la respuesta a si es acertada la política de Catalá de llenar de autobuses las zonas peatonales de València te la da la propia EMT”. “Fracaso absoluto con el paso de una única línea. La semana que viene se vienen seis (600 autobuses) Prepárense para el espectáculo”, advirtió también en redes.

La edil socialista María Pérez criticó la improvisación con la que la alcaldesa de València, María José Catalá, está gestionando la movilidad de València. “Desde el Partido Socialista llevamos semanas advirtiendo que la remodelación de líneas de la EMT por la calle San Vicente y Plaza del Ayuntamiento no es compatible con el flujo actual de peatones y lo sucedido ayer lo pone de manifiesto”, dijo.

“Además, hemos propuesto itinerarios alternativos por la calle Poeta Querol para permitir acercar algunas líneas al centro sin poner en duda ni un centímetro de espacio peatonal, ni empeorar la velocidad comercial de las líneas de autobús. Y esa propuesta socialista ha sido la solución por la que ha optado la EMT ante el caos generado ayer, tal y como informó la empresa en sus redes sociales”, añadió la edil.