En una nota, la asociación considera que las medidas fiscales aprobadas responden “a un afán recaudatorio y perjudicarán aún más los ya maltrechos bolsillos de los consumidores de electricidad”.
Además, lamenta el “eterno aplazamiento de reformas estructurales a largo plazo” en el sector y considera que los nuevos impuestos “no atacan los problemas de fondo del sistema eléctrico español”.
Entre estos problemas, cita los “abultados beneficios sobrevenidos de las centrales nucleares e hidroeléctricas ya amortizadas” y la falta de garantías de un futuro sostenible.
Asgeco también alude a la ausencia de un organismo regulador con autoridad en el sector. “Cada año los reguladores tienen menos poder”, de modo que “las sanciones impuestas a las grandes eléctricas por fijar los precios en el mercado no son en absoluto disuasorias”, señala.