La Ertzaintza puso en marcha esta investigación la pasada primavera, tras detectar que un taller mecánico ubicado en Arrigorriaga podría estar siendo utilizado con base para llevar a cabo actividades relacionadas con el tráfico de sustancias estupefacientes. A partir de ese momento, se estableció un dispositivo de vigilancia en torno al local, que permitió confirmar que el negocio estaba siendo usado por una banda organizada para almacenamiento y distribución de droga, principalmente speed, en “notorias cantidades”.
Las indagaciones realizadas llevaron a concluir que se estaba ante un entramado organizado que traficaba con droga proveniente de Holanda y que podría llegar a almacenar en determinados momentos en este lugar hasta 100 kilos de la sustancia estupefaciente. Los agentes comenzaron a realizar seguimientos tanto al responsable de taller como a otros dos correos y el pasado jueves observaron que uno de los investigados llegaba al taller a bordo de un turismo, salía con una maleta y entraba en el taller.
Poco después salió de nuevo en actitud vigilante, con la misma maleta, y se introdujo en su coche para disponerse a abandonar el lugar. Ante esta situación, los ertzainas interceptaron su marcha poco después y procedieron a su identificación. En el interior de la maleta había 30 kilos de speed.
El presunto traficante fue detenido y posteriormente, con la correspondiente autorización judicial, se llevó a cabo una entrada y registro en el taller, donde fueron localizados otros seis kilos de esa sustancia y una “considerable” cantidad de dinero. El responsable del negocio y la persona que le acompañaba fueron también arrestados como autores de un delito contra la salud pública.
En el pabellón fue localizada además una máquina troqueladora de tarjetas de crédito y se investiga si puede haber sido utilizada para llevar a cabo alguna actividad ilícita.
250.000 DOSIS
El total de 36 kilos de droga incautados habrían supuesto la puesta a la venta en la zona en la que trabajaban, principalmente Euskadi y Navarra, de alrededor de 250.000 dosis de speed cuyo valor alcanzaría los 500.000 euros, según ha explicado la Consejería de Seguridad.
Dos de los detenidos han ingresado en prisión tras ser puestos a disposición judicial y por el momento la Ertzaintza mantiene abierto el operativo con el fin de poder dar por desmantelada la banda.