A pocas semanas de que venza la moratoria temporal que impide destinar nuevos terrenos a plantaciones de eucalipto en Galicia, la Xunta ha decidido que esa prohibición se levanta en algunos casos y se podrán crear nuevas masas de esta especie si son para reemplazar otros cultivos que se han degradado o si es para sustituir áreas de pinos con la enfermedad de la banda marrón. El anuncio lo ha hecho la conselleira do Medio Rural, María José Gómez, que lo ha presentado como una “flexibilización” de la moratoria, que en el resto de los aspectos se prolonga hasta 2030. Fuera de esos dos casos, las nuevas plantaciones seguirán sin autorizarse.
La actual moratoria se anunció en 2021, cuando en los montes gallegos había ya el doble de hectáreas de este árbol de las que estaban previstas para 2032. Gómez defendió que la decisión tiene “el único fin de aumentar la productividad” del monte gallego y luchar contra el abandono, recoge Europa Press. Aseguró también que, pese a que se volverán a permitir nuevas plantaciones, se conseguirá igualmente el objetivo de reducir las masas de eucalipto con la retirada de unas 20.000 hectáreas entre terrenos de Red Natura y franjas secundarias próximas a viviendas.
Una de las excepciones a la prohibición de destinar nuevos terrenos al eucalipto es cultivar la especie en parcelas distintas para sustituir otras fincas en las que crecía este árbol, en las que se deberán plantar coníferas o frondosas. Además, la superficie de la nueva plantación no deberá superar el 75% del eucalipto que había en la original y el 25% deberán ser coníferas o frondosas. Esta medida podrá hacerse entre diferentes propietarios, lo que conselleira destaca que es una novedad respecto a la legislación vigente, dado que plantar para repoblar estaba ya permitido.
“Estamos hablando de que, como hasta ahora, se puedan llevar a cabo sustituciones de masas de eucalipto, especialmente de las más degradadas, para incrementar su productividad. Y que, al mismo tiempo, se favorecerá que o bien el mismo titular o bien entre titulares diferentes puedan redistribuir las plantaciones por otras zonas del territorio en las que esté permitido”, añadió Gómez.
El segundo de los supuestos pasa por ofrecer a los propietarios de pinos afectados por la enfermedad de la banda marrón sustituir hasta un máximo del 50% de esas plantaciones por eucalipto durante un turno de corta. El otro 50%, aseguró la conselleira, debe reforestarse con coníferas y frondosas. Tras el turno de corta, dijo, es obligatorio plantar coníferas o frondosas.
Las medidas va a estar incluidas en la ley de acompañamiento a los presupuestos para 2026.
El anuncio ha sido recibido con críticas por parte del BNG. La diputada Montse Valcárcel calificó la medida de “pseudomoratoria” que hace evidente que la Xunta “o no entendió nada de la problemática forestal o no lo quiere entender”. Cree que la consecuencia será que quienes tienen terrenos con cultivos de pinos se verán incentivados por la propia Consellería a plantar eucaliptos. Lo que hay que hacer, sostuvo, es destinar presupuestos para eliminar esta especie de zonas en las que se ha plantado de forma ilegal. Añadió que el Gobierno gallego no es transparente con los datos, ya que no se ha publicado el inventario forestal continuo referido a 2024.