El día estaba marcado en el calendario para las miles de familias que se verán afectadas por el paro. Aunque el número de residencias que se suman a la convocatoria se ha reducido este fin de semana gracias al preacuerdo alcanzado por los sindicatos ELA y LAB con Eulen Sociosanitario y Zu eta Biok, la preocupación entre las familias de los casi 3.000 ancianos damnificados sigue siendo alta.
El Gobierno vasco ha establecido servicios mínimos del 50%, y 60% en las horas punta -el desayuno, la cena y la hora de acostar- para mermar esta preocupación, pero no se puede olvidar que la inmensa mayoría de los perjudicados se encuentran en situación de gran dependencia y necesitan supervisión en las cuestiones más elementales.
Los paros han arrancado a las 9:00 horas con una acampada en el Boulevard donostiarra, una concentración que está prevista también para cada viernes a las 11:30 horas en este mismo lugar.