El debate sobre la plantación del viñedo enciende el Parlamento
Uno de los principales debates del pleno del Parlamento se ha abierto con la pregunta de la portavoz socialista, Concha Andreu, quien ha pedido al presidente un balance del reparto de viñedo. Para la diputada del PSOE, ha sido “un acontecimiento con varios capítulos”.
El primero, ha relatado, “es que ha sido un fraude”, dado que una medida que “tiene como fin favorecer a los jóvenes agricultores, se ha convertido en una catálogo de tretas”. Algo que, ha dicho, “es tan indiscutible que todo el sector lo ha reconocido”.
El segundo capítulo, ha seguido, es que “el Gobierno se ha visto obligado a revisar expedientes; ha tenido enviar a la Fiscalía uno cuando todo el mundo sabía que todo estaba mal”.
Ceniceros le ha recordado que “el Gobierno de La Rioja es un tramitador de las normas marca el Ministerio” y que “aún así ha sido absolutamente riguroso”.
“Me preocupa que hable de fraude, está usted acusando a todos los solicitantes”, le ha dicho, cuando se ha enviado “un expediente entre 646 por una posible falta de falsedad documental”.
Esto, ha creído, es una “muestra de contundencia ante algún intento de fraude” y ha anunciado “tolerancia cero a la corrupción y, también, a las personas que acusan sin demostrarlo”.
El debate sobre el viñedo ha seguido en las preguntas al Gobierno, con un enfrentamiento dialéctico entre el consejero de Agricultura, Iñigo Nagore, y el diputado socialista, Jesús María García, quien ha asegurado que, a pesar de lo dicho por el consejero, se habían admitido expedientes de cambio de uso forestal, para plantar viñedo, después del 15 de octubre de 2016, y que se habían visto encinas arrancadas.
También ha criticado el trato a los diputados a la hora de querer revisar los expedientes, que, ha dicho, no se les había facilitado. Nagore le ha replicado que su volumen hacía inviable el envío al Parlamento y ha asegurado que habían estado a su disposición en varias ocasiones. Una máxima que ha levantado las protestas de los diputados socialistas, desde sus asientos.
El clima se ha vuelto tenso cuando Nagore le ha recordado a García su condición de agente forestal y le ha pedido que tenga cuidado con decir cosas que no son verdad. El socialista, y sus compañeros, se lo han tomado como una amenaza, han levantado la voz y la presidenta ha llamado al orden insistentemente.
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