La demanda potencial de La Rioja como destino turístico de interior ha crecido en veinte puntos, del 29 al 49 por ciento, entre 2002 y 2008, gracias, en gran medida, al sector del turismo enológico.
Así lo constata un estudio sobre la imagen general de La Rioja como destino turístico, elaborado por la empresa Ikerfel, que han presentado hoy la consejera de Turismo, Aránzazu Vallejo, y la directora general de Turismo, Mónica Figuerola.
Según esta investigación, la penetración de La Rioja como destino turístico de interior se ha situado en el 26 por ciento, tres puntos por encima de hace seis años, con Madrid y Barcelona como principales comunidades autónomas que destacan a La Rioja como un destino de interés.
La principal causa por la que se viaja a La Rioja es la de visita a amigos y familiares, más de un 30 por ciento; mientras que el 27 por ciento llega por turismo cultural, el 21 a conocer ciudades y municipios y el 17 a realizar rutas turísticas.
VINO
En todo caso, asegura el estudio, el motivo “diferencial” por el que se elige La Rioja como destino es el vino y la gastronomía, ya que si en 2002 el siete por ciento de los visitantes llegaba a esta región por cada uno de estos motivos, ahora lo hacen el 16 y el nueve por ciento, respectivamente.
De hecho, según las encuestas, los visitantes destacan como aspectos más conocidos de la región las comarcas del vino, las bodegas y los museos del vino.
Con todos los datos obtenidos, el “perfil” de la imagen de La Rioja como destino turística presenta a esta región como segura, con interés paisajístico e histórico, una buena oferta hotelera -sobre todo en el medio rural- y especialmente atractiva para pasar unas vacaciones relajadas, para fines de semana y “puentes” festivos.
También se ha constatado una predisposición de los visitantes a repetir el viaje a La Rioja, en el 86 por ciento de los casos; y un elevado nivel de prescripción, en el 98.
HOTELES RURALES
Se ha comprobado que los hoteles rurales son más atractivos que los urbanos, que La Rioja es percibida como un destino para adultos y grupos que no sólo buscan actividades de enoturismo, sino también culturales, deportivas y gastronómicas.
Figuerola ha explicado que algunos de los aspectos a mejorar por La Rioja, según el estudio, son el precio de los alojamientos y la necesidad de ofertar más actividades deportivas y de vinoterapia.
Ha resaltado que hay una “imagen de marca poderosa”, de la que los principales competidores son Ribera de Duero, Rías Baixas, Xerez y Penedés.
La consejera de Turismo ha subrayado la “valoración positiva” que constata este estudio de La Rioja como destino, gracias al esfuerzo conjunto de la administración y los empresarios, “una suma de esfuerzos que hay que mantener para seguir mejorando y ofrecer una actividad más completa”.