En la madrugada del lunes llegaron a la cosa de Santanyí, Mallorca, once inmigrantes a bordo de dos pateras. El capitán del barco que debía llevarles esta mañana a Barcelona para ser ingresados en un Centro de Internamiento para Extranjeros (CIE), ha impedido la entrada a la nave de tres de ellos por riesgo de que estuvieran enfermos.
Estas tres personas han sido trasladadas a las dependencias de la Jefatura Superior de Policía de Palma para ser llevados posteriormente al hospital de Son Dureta.
Pese a que los tres deberían haber asistido a la revisión médica, el Hospital de Manacor informó de que sólo uno de ellos acudió a ser examinado. Cuando los tres sean revisados y dados de alta, serán llevados de nuevo a la Jefatura de Policía a la espera de poder ser trasladados a un CIE de la Península, donde ingresarán durante un tiempo indeterminado, para ser deportados de nuevo a su país, como indica el procedimiento según recoge la Ley de Extranjería.
Con estas dos pateras ya son trece las embarcaciones de este tipo llegadas a las costas de Mallorca desde el año 2006. Todas ellas proceden de Argelia y aprovechan una antigua ruta de contrabando entre ambos puntos.