El tenista estadounidense John Isner pagó el cansancio tras el maratón que vivió ante Nicolas Mahut en primera ronda, en un partido que duró 11 horas y cinco minutos y se prolongó durante tres días, y se despidió del torneo de Wimbledon en segunda ronda.
El norteamericano sólo pudo aguantar 73 minutos ante el holandés Thiemo De Bakker para despedirse por 6-0, 6-3 y 6-2 en un partido en el que no pudo firmar ningún 'ace' después de los 112 que conectó ante el galo.
Isner, que mantuvo 69 veces seguidas su servicio, cedió sus cuatro primeros saques, acabó con 32 errores no forzados por los cinco del neerlandés y necesitó asistencia médica en el cuello tras ceder el primer set en 16 minutos. Además, necesitó hablar con su entrenador en casi todos los intercambios y comió numerosos plátanos y barritas energéticas.