El Ayuntamiento de Logroño ha aprobado de forma definitiva los Planes de Acción en materia de contaminación acústica de la aglomeración de Logroño, tanto el correspondiente al año 2018 como el del año 2023. Unos acuerdos que, en ambos casos, han contado con el apoyo de todos los Grupos Municipales, con la excepción de la abstención de Vox.
Como ha explicado el concejal de Medio Ambiente, Jesús López, se ha hecho “un buen trabajo” con estos planes, “con medidas adecuadas para reducir la contaminación acústica estructural”, que, en este caso, incluye infraestructuras de transporte, infraestructuras ferroviarias e infraestructuras industriales.
Así, con estos planes, con los que “nos ponemos al día en la normativa en el plazo establecido por la Unión Europea, julio de este año”, se recogen “puntos de ejecución que iremos desarrollando durante los próximos cinco años, algunos de ellos ya en marcha”.
En este sentido, ha citado acciones como la instalación de 145 puntos públicos de recarga eléctrica de vehículos, “continuar con el despliegue de pasos elevados en la ciudad”, la instalación de limitadores de velocidad o la finalización de la ejecución de la Ronda Sur.
“Hemos agilizado la tramitación de estos planes que el anterior Ejecutivo local dejó sin resolver, al igual que hemos llevado al Consejo Social del pasado viernes la aprobación de la declaración de zonas de protección acústica especial de la ciudad de Logroño. Un paso previo a su aprobación definitiva en un pleno municipal”, como recordó el concejal en el momento de la aprobación inicial de los planes.
Las zonas de protección acústica especial tras las mediciones realizadas en 2022, una la correspondiente al Centro Histórico con extensión a la zona de discotecas de Duquesa de la Victoria, Siervas de Jesús y Saturnino Ulargui, y la segunda que comprende la calle Vitoria junto a un tramo de las calles Labradores y Fundición.
En el turno de los grupos, por el PR+, su portavoz Rubén Antoñanzas, ha criticado al equipo de Gobierno por ser “poco ambiciosos” y ha apuntado en concreto al ruido que “soportan los escolares, o las personas que están en centros hospitalarios o que viven en determinados entornos”.
Desde el PSOE, el edil Álvaro Foncea ha mostrado el apoyo del grupo a esta aprobación para “luchar contra la lacra del ruido”, que ha calculado afecta a 30.000 personas en horario diurno, y a unas 45.000 en nocturno, al tiempo que ha pedido “diálogo” para hacer de Logroño “una ciudad más sostenible”.
Por último, la portavoz del Gobierno local Celia Sanz ha recordado que “estamos avanzando” en aprobar “planes que estaban pendientes” y que tienen una tramitación administrativa, como ocurre en el caso de las Zonas de Protección Acústica o las Zonas de Bajas Emisiones, “con el objetivo final de la convivencia de todos los medios de transporte”.