Puntos para los visitantes y derrota local
La tercera jornada de Segunda B deparó puntos para los equipos riojanos que jugaron a domicilio, caso del Calahorra, que venció 0-1 a la Mutilvera, y la SDL, que empató 1-1 frente al Izarra en Merkatondoa; y derrota para el único local, un Haro que todavía no sabe lo que es ganar y que sigue de vacío en el El Mazo, donde tampoco ha marcado. En cuanto a la clasificación de este subgrupo B, el Tudelano lidera con 7 puntos, seguidos del Calahorra con 6; a continuación aparecen SDL, Ebro y Tarazona, todos ellos con 4 puntos y dos partidos en su casillero, Osasuna B y Mutilvera cuentan con 3; Ejea suma 2, mientras que el Haro es colista con 1 punto, misma puntuación que el Izarra.
El Calahorra, como hiciera en el derbi ante el Haro en la jornada inaugural, fue más práctico y sobrio que brillante, pero se llevó los tres puntos ganando por idéntico marcador: 0-1. En esta ocasión, la víctima de los rojillos fue una Mutilvera que apretó en los minutos finales y acabó sometiendo a los riojabajeños. Cierto que los de Diego Martínez pudieron llegar a esa parte del duelo con un marcador más amplio después de que en el segundo tiempo aprovechara los espacios que dejaba el cuadro navarro. Y ya se sabe lo que sucede en esta categoría, que con una renta tan corta, el equipo local empuja para acabar arrinconando a su oponente en el área, como le sucedió el pasado sábado al Calahorra.
Amorrortu volvió a ser fundamental para los suyos. Dos goles ha marcado el delantero y 6 puntos ha sumado el equipo. Esta vez, el tanto llegó a los 15 minutos después de una gran acción colectiva culminada por el exdelantero del Amorebieta previa asistencia de Tarsi. Una diana que hacía justicia a lo que se veía en el Valle de Aranguren, con un bloque riojano más incisivo y dominador que la Mutilvera. Sin embargo, a raíz del gol, los locales fueron a más, mientras que los de Diego Martínez retrasaron su ímpetu y se dejaron dominar, aunque sin sufrir en exceso más allá de alguna aproximación pero sin remate.
En la segunda mitad, el Calahorra retomó la iniciativa para no sufrir y dispuso de oportunidades para ampliar la diferencia, como una falta que se marchó al poste de Jesús Álvarez, un remate de Rayco y un cabezazo de Amorrortu que sacó Valencia cuando se cantaba el gol. Con el partido sin cerrar, la Multivera, en los últimos minutos, buscó las tablas ante un cuadro rojillo que supo aguantar y sufrir para llevarse el triunfo.
Por su parte, la SDL logró un valioso punto en un choque en el que pudo perder, de no haber remediado una primera parte en la que estuvo a merced del rival, pero en el que también pudo ganar, de haber aprovechado alguna oportunidad en la segunda mitad. A los de Albert Aguilá, en este sentido, les costó adaptarse a lo que exigía Merkatondoa. Las segundas jugadas, la intensidad y la atención a las acciones a balón parado fueron claves para que el Izarra fuera mejor durante los primeros 45 minutos. Jero resultó providencial para evitar que los estellicas fueran con un gran ventaja al descanso. Gómez puso, nada más comenzar el duelo, al meta blanquirrojo tras un córner. También Cabrera lo intentaría en el segundo palo, sin fortuna.
Los logroñeses estaban sufriendo y Ruper, de falta directa, anotaba para certificar la superioridad de los anfitriones pasada la media hora. El tanto sirvió para que la SDL se entonara y fuera equilibrando los tiempos, aunque Gómez volvió a tener el segundo antes del ecuador. Aguilá movió el banquillo en el descanso (triple cambio) y nada más reanudarse el encuentro Calderón empataba tras un pase de Achi justo después de que Gómez volviera a rondar el 2-0. El gol dio la tranquilidad y el poso que necesitaba la escuadra blanquirroja, aunque el Izarra lo siguió intentando con acometidas, muchos centros laterales y poniendo énfasis en jugadas de estrategia. La SDL tenía espacios, pero costaba conectar, aun así dispuso de alguna oportunidad para asustar y llevarse la victoria, quizá hubiera sido cruel para los méritos de un Izarra que dominó más tiempo los ‘tempos’ del choque.
Mientras que el Haro sigue sin conocer el triunfo. No sólo eso, es que además en El Mazo ha encadenado dos derrotas por idéntico resultado, 0-1. Si ante el Calahorra, el duelo fue equilibrado con pocas oportunidades, contra Osasuna B se puede decir que el patrón fue similar. La diferencia estribó en que los rojillos marcaron a las 15 segundos, gracias a Joel Rodríguez, un tanto que condicionó a unos y a otros. Si los jarreros tuvieron que asumir el control del partido, con lo que les sueles costar, el filial navarro dejó hacer para confiar en ‘matar’ el partido a la contra. No hizo falta porque el equipo de Aitor Calle se mostró bastante estéril en la faceta ofensiva, ya que apenas se contabilizaron dos oportunidades para empatar, ambas en la primera parte.
Así, Iván Garrido -tuvo que abandonar el partido pasada la media hora por lesión- pudo empatar con un tiro que se fue rozando el larguero y Urrecho, su sustituto, estuvo cerca de poner las tablas en los últimos instantes del primer tiempo con un tiro que se marchó al lateral de la red. Durante la segunda parte, el Haro lo intentaría pero más con corazón y ganas que con criterio. Osasuna B incluso cogió aire con el paso de los minutos ante la incapacidad de los blanquinegros para poner en aprietos al meta navarro. También hubo tiempo para la polémica por una posible mano de un defensor local en el área que podía haber roto definitivamente la contienda de haberse señalado penalti. No fue así. De todas formas, Fermín salvaría la sentencia y aunque el Haro apretó en la recta final, no dispuso de ocasiones.
Foto: CD Calahorra
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