Carmena renombrará la plaza del Dos de Mayo para evitar conflictos con Francia (inocentada)

Adiós a la plaza del Dos de Mayo. El último pleno del Ayuntamiento de 2015 aprobará el cambio de nombre de este popular lugar de Malasaña, según ha podido saber este periódico. Lo hará después de las quejas del Gobierno galo, que ha mostrado en repetidas ocasiones sus reservas a que Madrid conserve placas que recuerdan un conflicto armado entre dos países ahora amigos.

El último toque de atención se produjo en noviembre, durante el encuentro que mantuvieron las dos alcaldesas de las capitales de ambos países, Manuela Carmena y Anne Hidalgo. Fue en el palco del Bernabéu, durante el Real Madrid-PSG de la Champions. Entonces, Hidalgo le dijo abiertamente a Carmena que su país vería como un gesto de buena voluntad que se eliminaran referencias a las guerras entre Francia y España. La mandataria madrileña prometió estudiarlo y darle una solución antes de final de año.

“No queremos animar al revanchismo histórico”, informan a Somos Malasaña fuentes del Ayuntamiento de Madrid para justificar el cambio de nombre. “Lo pasado, pasado está. Las relaciones con Francia son ahora buenas y no queremos que una invasión que tuvo lugar hace 200 años pueda enturbiarlas”, explican.

La sustitución de las placas se hará de forma inmediata y el área de Cultura, encargado del Plan de Memoria para sustituir también las nomenclaturas franquistas, trabaja a contrarreloj para dar una nueva denominación a la plaza con más solera de Malasaña. Entre las propuestas se barajan algunos que tienen que ver con los movimientos sociales recientes -plaza del 15M- o con el pasado musical del barrio -plaza de la Movida-. También se está estudiando hacer un guiño al país vecino homenajeando a su gastronomía. El topónimo elegido en este caso sería el de plaza de la tortilla francesa.

El renombramiento del lugar para evitar conflictos diplomáticos con Francia no afectará a calles aleadañas dedicadas a héroes de los levantamientos del Dos de Mayo. Daoíz y Velarde también conservarán su monumento, aunque se sustituirán sus espadas por unas litronas en sus puños, “para añadirles un toque festivo y por petición popular, puesto que la gente ya lo hacía constantemente durante los fines de semana”, añaden fuentes municipales. Manuela Malasaña y Clara del Rey también serán personajes recordados, “aunque se evitará señalar en la medida de lo posible que dieron muerte a varios soldados franceses”.

Los vecinos: “¡Muerte al francés!”

La decisión municipal no ha sentado bien entre los vecinos y colectivos sociales de Malasaña, que no vieron venir la maniobra del Ayuntamiento por estar enfrascados en poner un nuevo nombre a la plaza franquista de Juan Pujol. A las pocas horas de hacerse pública la noticia, grupos de madrileños recorrían las calles con antorchas y palos gritando “¡muerte al francés!”, recordando el alarido de guerra con el que los vecinos se levantaron en armas contra los franceses hace 200 años.

Fruto de las revueltas fueron asaltadas dos creperías de la zona, una ubicada en la calle Madera y otra en Colón. También resultó herido un hipster con bigote y camiseta de rayas, que pasaba por Espíritu Santo con aire afrancesado y fue confundido por la turbamulta con un ciudadano galo, pese a ser de Carabanchel. Fue golpeado en la cabeza mientras era llamado 'petrimetre'. Puedes ver el vídeo de la agresión en este enlace.