Cuando aún humea la polémica por la revisión que el Ayuntamiento ha sometido a la cabalgata de Reyes Magos, llega, con la primera fiesta del año, una nueva actualización. Las fiestas de San Antón llevan este año el subtítulo -en forma de hashtag- #SanAntónAnimalista.
Un oso tristón protagoniza el cartel de unas fiestas que, por otro lado, suman un gran número de actividades y entidades ciudadanas y ecologistas a un programa que trasciende a lo que estábamos acostumbrados en los últimos años.
Según explica el Ayuntamiento en la página web que ha diseñado para las fiestas:
El marchamo reivindicativo de Ahora Madrid impregna así a una de las fiestas con más solera de la ciudad. A los tradicionales panes del santo, a las bendiciones de los animales en la iglesia de la calle Hortaleza y a vueltas (un desfile con animales por las calles Hortaleza, Travesía de San Mateo, San Mateo, Fuencarral y Hernán Cortés), se unen este año charlas sobre veganismo, talleres infantiles de concienciación sobre los derechos de los animales o actos sobre el maltrato animal. El pregón de fiestas lo dará este año la escritora Elvira Lindo.
Aunque la fiesta hunde sus raíces en el medievo, se trata de una celebración que ha ido cambiando a lo largo de los años. Empezó como fiesta grotesca, en la que los porqueros elegían al rey de los cerdos y al rey de los porqueros (el ganador se disfrazaba de San Antón, con una larga barba blanca). Los porqueros se dirigían luego a la Iglesia de San Antón para que se bendijera la comida de los animales (origen de la actual tradición). Cuando la ciudad creció la fiesta fue celebrada en otros lugares y es prohibida en numerosos momentos históricos. La costumbre de hacer un itinerario urbano data de tiempos de Isabel II, en el siglo XIX. Con Franco se añade el pregón y acabará suspendiéndose (no así la bendiciones) aduciendo problemas con el tráfico. La actual versión de la fiesta es una reconstrucción historicista de la antigua romería que data de tiempos de Tierno Galván.
*Las vueltas de San Antón: de romería a desfile