La Defensora del Pueblo, Soledad Becerril, considera que la agresión sufrida ayer por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, es “absolutamente rechazable” y añade que las instituciones del Estado y sus representantes “merecen todo el respeto” de los ciudadanos.
“La violencia y agresividad que denota este hecho y otros de índole parecida hacia cualquier ciudadano debe preocupar a todas las instituciones, a quienes las conforman, a los docentes y, desde luego, a las familias en el caso de los menores”, dice Becerril en un comunicado publicado en la web.
La Defensora explica que, en un Estado de Derecho, la soberanía reside en el pueblo, que es quien elige a sus representantes.
El candidato del PP a repetir en la Presidencia del Gobierno en las elecciones generales recibió el puñetazo de un menor de 17 años cuando paseaba por Pontevedra saludando a simpatizantes y haciéndose fotos con ellos.