La Policía Judiciaria de Portugal comunicó a los agentes españoles que en un vuelo procedente de Lisboa y con llegada en Barcelona, una mujer podría transportar sustancias estupefacientes en su equipaje. Una vez registrado se comprobó que transportaba cocaína y se intervinieron 1.500 euros.
En otro vuelo con destino Barcelona, la Policía portuguesa informó a la Policía Nacional de las sospechas de que un hombre y una mujer, de nacionalidad brasileña, transportaban la sustancia estupefaciente. Los agentes tuvieron que desmontar sus dos equipajes donde hallaron un doble fondo con dos planchas de cocaína, de casi tres kilos cada una.
Los agentes portugueses informaron de otra personas sospechosa de transportar la droga en su maleta en un vuelo procedente de Brasil con destino en Madrid. El hombre de nacionalidad venezolana llevaba en su equipaje la sustancia estupefaciente.