El grupo terrorista Estado Islámico (EI) crucificó hoy a tres personas a las que acusó de “contrabando de ciudadanos fuera del territorio” controlado por los radicales en Siria, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
Las tres víctimas fueron crucificadas en la rotonda de Al Dala, en el centro de la ciudad de Al Raqa, principal bastión de los extremistas en Siria.
El Observatorio afirmó que hace semanas el EI comenzó a reclutar a ciudadanos para que integren “células durmientes” para evitar que los contrabandistas saquen a civiles de sus dominios en el país árabe.
El EI proclamó a finales de junio de 2014 un califato en el territorio sirio y en Irak, donde ha tomado zonas del norte y el centro de ambos países.
En las áreas que dominan, los yihadistas aplican una versión radical de la sharía o ley islámica e imponen estrictos castigos, que incluyen, entre otros, la muerte por decapitación, lapidación o por disparos en la cabeza, para aquellos que contravienen sus normas.