El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha lamentado hoy el envío a prisión de los dirigentes de la Asamblea Nacional Catalana (ANC) y de Òmnium Cultural y ha alertado de que judicializar la política en el ámbito penal puede provocar “tensionamiento social”.
Urkullu ha difundido este comentario en las redes sociales después de que la juez de la Audiencia Nacional Carmen Lamela haya ordenado el ingreso en prisión sin fianza por sedición al presidente de ANC, Jordi Sánchez, y al de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, por “promover” el asedio a la Guardia Civil el 20 de septiembre durante una operación para impedir el 1-O.
“Esta de hoy es una mala noticia”, ha señalado el lehendakari, quien ha considerado que “toda acción política que se judicializa en un ámbito penal resulta preocupante. Resulta muchas veces en una situación que provoca un tensionamiento social”.
Por ello ha apelado a la “proporcionalidad en la aplicación de la justicia”.
“No necesitamos escenarios de enfrentamiento sino de distensión que lleven a uno más esperanzador para la generación de un clima de convivencia”, ha concluido Urkullu.