El incendio forestal que afecta a los municipios coruñeses de Dodro y Rianxo continúa activo después de arrasar 850 hectáreas pero su evolución es “favorable”, señala la Consellería de Medio Rural en el primer balance de este miércoles, por lo que se ha desactivado la alerta por proximidad a viviendas.
La medición, subraya la Xunta en el comunicado, es provisional hasta que, una vez apagado, se parametrice la superficie afectada por estas llamas que se iniciaron en el atardecer del pasado lunes y, según la hipótesis principal que se maneja, por una chispa en un cable de alta tensión.
Además de Rianxo-Dodro, otros tres fuegos están activos en Galicia, todos ellos en la provincia de Ourense, uno con dos focos -las fuentes consultadas por Efe apuntan a que ha sido provocado- en O Barco de Valdeorras y es, de estos, el de mayor tamaño, con un centenar de hectáreas devastadas.
En Calvos de Randín está otro de los incendios, que ha entrado por Portugal, con más de 20 hectáreas quemadas y que afecta a un paraje natural protegido, el parque del Xurés; mientras que en Chandrexa de Queixa se encuentra el tercero y último, con un total de 20 hectáreas afectadas.