No hemos podido obtener una respuesta safistactoria, quizás porque puede que los expertos consultados tampoco supieran qué decir. Pero el dato objetivo es que el pasado viernes hubo una caída en los servidores de correos electrónicos de dos instituciones que tienen que ver indirectamente con el escándalo eólico, ya en manos de la Justicia: La Caja y el Gobierno canario. Durante cuatro horas se quedaron sin e-mail en la entidad de ahorros, donde todavía existe consternación por tener a un directivo encartado, y en la consejería de Economía y Hacienda, sector Franchy y Roca. Puede ser todo producto de la casualidad, como puede ser que los expertos en delitos informáticos de la Policía hayan estado escudriñando un rato a ver qué encontraban. Que ya se sabe que donde hubo siempre queda, y que los servidores guardan y guardan que es un gusto.