Con motivo del Día Internacional de las Mujeres AMECOOP-Andalucía y FAECTA han elaborado un manifiesto con el que se suman a la campaña de Naciones Unidas de este 8 de marzo de 2021, denominada “Mujeres líderes: Por un futuro igualitario en el mundo de la Covid-19”. De esta manera se quiere poner en valor a todas las mujeres que están sufriendo esta crisis con más virulencia y los enormes esfuerzos realizados por mujeres y niñas de todo el mundo a la hora de definir un futuro más igualitario en el actual contexto socioeconómico derivado de la pandemia provocada por el Covid-19.
El manifiesto también subraya que varias de las respuestas más eficientes y ejemplares ante la pandemia de la Covid-19 han sido dirigidas por mujeres y que la crisis actual ha puesto de relieve tanto la importancia fundamental de las contribuciones de las mujeres como las cargas desproporcionadas que soportan.
Desde FAECTA y AMECOOP-Andalucía reivindican la necesidad de una vida con derechos todos los días del año y denuncian la división sexual del trabajo que condena a las mujeres a la precariedad, la discriminación laboral, la brecha salarial y los trabajos peor pagados, no remunerados, invisibles e ilegales.
“Nuestro objetivo es afianzar el tejido empresarial en los pueblos y ciudades de Andalucía y nuestro reto está dirigido a hacer de la Economía Social andaluza un lugar libre de machismo, donde mujeres y hombres puedan desarrollar sus proyectos vitales y económicos en democracia, y justicia social” ha afirmado Carmen Perea, presidenta de AMECOOP-Andalucía.
Perea también ha reivindicado que “a las mujeres cooperativistas nos gustaría conmemorar el 8 de marzo de 2021 con pleno empleo en Andalucía, con mujeres en todas las mesas de decisión, con una economía y empresas que sean copartícipes de la conciliación y el cuidado de las personas, y sobre todo en una sociedad justa y democrática con plena ciudadanía de las mujeres”.
"A las mujeres cooperativistas nos gustaría conmemorar el 8 de marzo de 2021 con pleno empleo en Andalucía, con mujeres en todas las mesas de decisión, con una economía y empresas que sean copartícipes de la conciliación y el cuidado de las personas”.
“Reivindicamos que la situación laboral nos permita desarrollar un proyecto vital con dignidad y autonomía y que el empleo se adapte a las necesidades de la vida para que el embarazo o los cuidados no puedan ser objeto de despido ni de marginación laboral, ni afecte a las expectativas personales ni profesionales” han exigido desde estas organizaciones cooperativas.
AMECOOP-Andalucía y FAECTA trabajan de la mano en el sector de la economía social para lograr un empresariado y un mercado laboral que se base en la igualdad real y efectiva. Rechazan la desigualdad y discriminación que sufren las mujeres en el mercado laboral y en particular la brecha salarial, y denuncian la cronificación del desempleo femenino, la violencia machista y la insuficiencia de medidas en todos los ámbitos, con especial consideración al laboral. Ambas entidades coinciden en que aún queda mucho camino por hacer hasta lograr la igualdad real de oportunidades y derechos entre ambos sexos y exigen medidas correctoras que eliminen el déficit democrático que sufren las mujeres para lograr una sociedad más justa, social y democrática.
En este sentido, apuestan por que se visibilice y reconozca el valor y dignidad del trabajo doméstico y de cuidados que realizan en su mayoría las mujeres y los derechos de quienes lo realizan, para que se asuma la corresponsabilidad por parte de todos los hombres, de la sociedad y del Estado.
El cooperativismo andaluz, según recoge el manifiesto, asume el compromiso social de seguir trabajando para mejorar el empleo digno, justo y de calidad de las mujeres andaluzas y de combatir el techo de cristal en las empresas y organizaciones de este sector.
Las mujeres se encuentran en primera línea de batalla contra la COVID-19 como trabajadoras del sector de la salud, cuidadoras, médicas, limpiadoras o científicas. A pesar de ello, ganan un 11 por ciento menos globalmente en comparación con sus homólogos masculinos (según señala un análisis de equipos de trabajo sobre la Covid-19 de 87 países, solamente el 3,5 por ciento de estos tenían paridad de género).