Camacho, la referencia
En 1992, tras el tercer ascenso del club a Primera división, el Rayo Vallecano deslumbraba en el fútbol español. Con José Antonio Camacho como entrenador y con futbolistas como Wilfred, Pizo Gómez, Miguel Hernández, García Cortés, Josete, Cota, Pablo Gómez, Pedro Riesco, Josip Visnjic, Calderón o Polster el conjunto franjirrojo destacaba -de manera sorprendente- entre los mejores. En aquel equipo sobresalía Paco Jémez, un joven central (22 años) formado en el Córdoba y que era indiscutible en los planes del técnico murciano.
La apuesta de Camacho por Paco Jémez, pese a que ambos tomaran diferentes destinos al término de aquella campaña en el Rayo (el entrenador aceptó el reto de devolver al RCD Espanyol a Primera división, mientras que el central se enroló en las filas del Super Depor que meses después perdió la Liga por un error de Djukic al lanzar un penalti), se mantuvo firme siempre y seis años después, con el técnico de Cieza al frente de la Selección, el defensa debutó como internacional español.
Paco Jémez disputó 21 partidos (incluso participó en la Eurocopa de 2000, en la que formó como pareja de centrales junto a Fernando Hierro) con España. Todos a las órdenes de Camacho, la persona que el nuevo entrenador de la UD Las Palmas, a la hora de colgar las botas y analizar su carrera como futbolista en una entrevista concedida al Diario de Córdoba en abril de 2007, señaló como la figura -en el ámbito deportivo- que marcó su trayectoria profesional.
Apuesta ofensiva
Graduado como entrenador nacional en el mismo curso que Pep Guardiola o Unai Emery, Paco Jémez difunde en su discurso una apuesta decidida por un juego atractivo. “Quiero que mi equipo sea valiente, que juegue al fútbol, presione arriba, que quiera el balón y que se mueva en campo contrario, ya que en un 99% de las veces gana el que mejor juega y el que no arriesga, no consigue nada”, explicó el pasado martes, durante su presentación como nuevo técnico de la UD Las Palmas.
Retirado -como futbolista- en 2005 (tras haber militado en Córdoba, Real Murcia, Rayo Vallecano -en dos etapas diferentes-, Deportivo de La Coruña, Real Zaragoza y Lugo), Paco Jémez admite que aún puede interpretar el fútbol desde el prisma de un jugador, aspecto de un valor incalculable para un vestuario, el de la UD Las Palmas, que dejó de creer en los métodos y formas de Sergio Kresic hace mucho tiempo. De momento, todos los futbolistas del equipo amarillo que han pasado por rueda de prensa esta semana han destacado los propósitos del nuevo técnico.
Su hoja de expediente, en los banquillos, de momento es exigua. RSD Alcalá, Córdoba y Cartagena han sido los destinos de Paco Jémez como entrenador. En los dos primeros no cubrió los objetivos marcados. Con el tercero firmó un ascenso a la Liga Adelante. Pero en las tres aventuras destaca el mismo denominador común: el buen juego desplegado por sus equipos. A su método, con Camacho como referencia, se lo juega todo la UD Las Palmas para huir de la amenaza del descenso a Segunda B.