Miguel Ángel Ramírez cree que el Sevilla no paga su porcentaje del traspaso de Vitolo por “mala fe”
El presidente de la UD Las Palmas, Miguel Ángel Ramírez, reiteró este martes que espera cobrar el porcentaje del 12,5% que le corresponde por el pase de Vitolo al Atlético de Madrid y aseguró que el Sevilla actúa “de mala fe” por no pagarlo.
“Esto lo negocié con (José María) Del Nido -anterior presidente del Sevilla- y si el Sevilla no me paga, alguien actúa de mala fe. Pero no tiene valor que lo diga yo, lo tiene que decir un juez o un arbitraje en LaLiga y habrá que atenerse a lo que se decida”, reiteró Ramírez a su llegada a la capital andaluza, donde este miércoles jugará su equipo frente al sevillista en el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán.
Este conflicto, sin embargo, no cree el dirigente grancanario que deba empañar las relaciones entre dos clubes que deben “dar normalidad a la situación” porque se trata de “equipos profesionales y las diferencias deben resolverse donde hay que resolverlas”, por lo que él no se va “a pelear con Pepe Castro -presidente del Sevilla”, dijo.
Ramírez asumió que su homólogo sevillista “entienda que no tiene que pagar; si es así, hace bien” en recurrir a los tribunales, donde él también esgrimirá “las razones que tenga, pero eso no quita que la relación se lleve con normalidad”.
El mandatario quiso “dejar claro que no” tiene “ningún problema con el Sevilla ni con el sevillismo”, puesto que le “encanta esta ciudad” aunque “cada uno defienda sus intereses. El Sevilla es muy grande pero Las Palmas, desde su humildad, también tiene su dignidad”, subrayó.
Miguel Ángel Ramírez aseguró que Vitolo “estaba contento de poder disfrutar de este partido” y auguró que “tendrá sensaciones encontradas, defendiendo la camiseta de Las Palmas contra un equipo al que le ha dado mucho. Es un chico noble que se debe a los colores del equipo que le paga”.
“Ojalá yo tuviera todos los veranos el problema que ha tenido Vitolo este año”, zanjó el presidente de Las Palmas.
El futbolista grancanario se desligó del conjunto andaluz haciendo efectiva su cláusula de rescisión de contrato -35,7 millones de euros- para firmar por el Atlético de Madrid hasta 2022, en una 'operación puente' con la UD Las Palmas, equipo en el que se formó y que lo acogerá hasta el próximo diciembre por la sanción que impide al club colchonero inscribir jugadores hasta enero de 2018.