La selección española recupera prestigio; Rusia se hunde y queda fuera
La contundente victoria (30-22) de España sobre Alemania permitió al equipo español certificar su presencia en la segunda fase del Europeo, donde no estará Rusia, que pese a contar con un oro y dos platas continentales, se marcha de Noruega sin lograr una sola victoria.
Todo lo contrario que el equipo español, que por fin, exhibió el juego que le llevó al título mundial en 2005 en Túnez y a la plata un año más tarde en el Europeo de Suiza, en un excepcional partido en defensa de los de Juan Carlos Pastor.
Liderados por un inexpugnable José Javier Hombrados, España tan sólo encajó tres goles en los primeros dieciocho minutos de la segunda parte, lo que propició el despegue de la selección nacional que logró su máxima renta -ocho tantos- coincidiendo con el pitido final.
Una victoria que sirvió para que España pase a la siguiente ronda, donde se medirá con Francia, Suecia e Islandia, con dos puntos en su haber, los mismos que Alemania y Hungría, sorprendente líder del Grupo C, tras imponerse a Bielorrusia por 31-26, en un choque en el que Nagy, junto con su compatriota Gergo Ivancsik, fue el máximo goleador con nueve tantos.
Pese a todo, los magiares no parecen tener el mismo potencial que Francia, líder invicto del Grupo D, tras sumar hoy su tercer victoria en tres partidos, al imponerse por 30-21 a Islandia, en una exhibición de Karabatic, autor de diez goles.
Por su parte, Suecia, que regresa en Noruega a una gran competición internacional, tras quedarse fuera del Europeo de Suiza 2006 y del Mundial de Alemania 2007, se impuso a Eslovaquia por 25-41, en un duelo que los escandinavos dejaron ya sentenciado en la primera mitad.
Más emoción en el Grupo B, donde Rusia, campeón de Europa en 1996, quedó eliminada del torneo por su peor diferencia de goles con Montenegro, que en su debut en un Europeo, ya ha superado con creces todas sus espectativas.
Rusia que cayó ante Dinamarca por 31-28, en un partido en el que el extremo izquierdo del Flensburg alemán Lars Christiansen anotó trece goles de trece lanzamientos, permitía a los montenegrinos la posibilidad de acceder a la segunda fase en el caso de no perder por seis o más goles con Noruega.
Objetivo que los balcánicos cumplieron aunque con muchos apuros, ya que cayeron por 27-22, en un partido en el que el jugador del Valladolid Alen Muratovic fue el máximo goleador montenegrino con ocho tantos.
Uno menos que el croata Ivano Balic, que volvió a liderar a Croacia a un nuevo triunfo en esta ocasión sobre Eslovenia por 29-24, que permite a los de Lino Cervar acceder a la segunda fase con cuatro puntos en su haber.
Dos más que Polonia, vigente subcampeona mundial, que selló su presencia en la segunda ronda, tras derrotar por 33-30 a la República Checa, gracias al acierto del cañonero Karol Bielecki que sumó un total de nueve goles.
