¿Por qué no te callas?

A mí me tiene sin cuidado que Zapatero reciba o no a Paulino. Aunque por asunto del oficio trate de entender las razones de conveniencia política de Zapatero para no hacerlo; y ya puesto, no comprenda las de Paulino para insistir, cuando un nacionalista de verdad ya lo habría mandado a freír bogas en lugar de salir con que el presidente desprecia a los canarios. No creo que nos vaya mucho en que Paulino consiga otra foto que colocar en la sala, que estos encuentros protocolarios no sirven para mucho más.

En cuanto a la legitimidad de Paulino, nadie la pone en duda. Para qué. Lo dice todo de él su falta de talento y recursos políticos con que montar un discurso que no sea culpar a Madrid de la incompetencia autonómica, articulándolo sobre un supuesto maltrato psocialista a Canarias que no ha resistido el primer análisis comparativo serio de la balanza fiscal Canarias-Estado. En ese contexto tiró de sus prontos de rompetechos y amaga con recurrir ante el Constitucional los presupuestos del Estado en defensa, dice, del REF. Pues, muy bien: que deje de amenazar y recurra, a ver qué pasa. Dudo que se atreva porque sabe que miente.

En cuanto al respeto que se le debe, diréles que, según mi abuelo, el respeto no se otorga ni lo da el cargo. Hay que ganárselo respetando primero a los demás. Paulino no ha respetado a Zapatero; ni a los catalanes y andaluces que, según él, se maman lo que nos pertenece, cosa que, además, es falsa.

Tampoco respeta a los canarios, pues miente peligrosamente por cuanto, como apuntaba ayer Paco Pomares, puede levantar opiniones contra las especialidades canarias que hasta ahora nadie ha discutido. Encima nos ha salido irresponsable. Y no tiene al lado quien le diga por qué no te callas; como el rey a Chávez y Condoleeza a Bush.

Criticar a un mal Gobierno de mandarines no es atacar a Tenerife, tras la que se atrincheran. Paulino y ATIcc no son Tenerife por la misma razón que no les sirve Soria de coartada grancanaria . Ellos son así y la culpa no es de sus islas de origen.