Helsinki Air Show Festival

Para aquellos que no estén familiarizados con este tipo de eventos, un festival aéreo es el lugar idóneo para conocer tanto aviones modernos como antiguos, verlos de cerca y, en la mayoría de los casos, verlos volar en vivo y en directo.

En este caso particular, los organizadores quisieron no sólo rendir homenaje a los veteranos que combatieron contra la Unión Soviética, sino ofrecer a los visitantes la posibilidad de conocer buena parte de la aviación de este país escandinavo. Además, el festival contó con la presencia de los Leningrad Cowboys -grupo musical conocido en el resto del mundo gracias a la película Leningrad Cowboys Go America, del director finlandés Aki Kaurismäki- y con The Red Army Air Force Choir.

En los dos días que duró el evento el programa de exhibiciones aéreas estuvo dividido en distintas secciones. Por un lado vimos grupos de paracaidistas, entre ellos, un grupo llegado desde la república báltica de Estonia. A continuación, los siempre vistosos programas ejecutados por avionetas acrobáticas, caso de la Pitts Special S-1 o de la Cap 231. Los vuelos de estas aeronaves, jalonados de arriesgados picados, loopings y adornados de estelas de humo blanco ?para potenciar el dramatismo de la acción- son siempre del agrado del público que acude a este tipo de eventos.

La historia de la aviación finlandesa estuvo representada por aviones de la talla del británico Gloster Gauntlet MKII GT400, el cual entró en servicio en 1940 en la guerra llamada Guerra de Invierno, contra los soviéticos; el biplano alemán Focke-Wulf Stieglitz; y dos ilustres veteranos de la aviación militar y comercial, el Douglas DC-3 ?conocido cariñosamente con el sobrenombre Dakota- y el Douglas DC-6.

Otro apartado que hizo las delicias de los asistentes fue el ver a los distintos helicópteros que volaron sobre el aeródromo de Malmi, especialmente los Agusta Bell 412, del servicio fronterizo finlandés, y los helicópteros militares NHI NH90 y Hughes 500. Este último hizo justicia a su sobrenombre Little Bird sorprendiendo a muchos de los asistentes por su versatilidad y rapidez.

Por último, y no por ello menos importante, se encuentra el apartado de los reactores representado por la Patrulla Acrobática de las Fuerzas Aéreas finlandesas, los Midnight Hawks. A lomos de sus BA System Hawks y el reactor estrella de las fuerzas aéreas del país, el McDonnell Douglas F-18 Hornet, consiguieron que el público asistente se emocionara y hasta chillara. Viendo la reacción del público que abarrotó el aeródromo ?se calcula que en los dos días asistieron unas 75000 personas- quedó claro que el plato fuerte del encuentro lo representaron aquellos minutos en los que los reactores surcaron el cielo.

En el festival también se pudieron admirar aviones que, aunque no volaron, fueron el foco de atención de los visitantes. Esto fue notable con el veterano Antonov AN-2 y con un producto genuinamente español, como lo es el EADS CASA C-295M, evolución del no menos conocido CASA C-235. Es más, una de las principales atracciones fue sacarse fotos sentado en la rampa del mencionado avión español, auténtico referente cuando se habla de los aviones de transporte militar en el mundo actual.

Tampoco se quisieron perder el encuentro las compañías aéreas Finnair, Finncomm y S.A.S/ Blue1. Esta última, suministradora de café para todo aquel que estuviera necesitado de cafeína.

Al final, después de varias horas en la pista del aeródromo respirando un aire fresco, mezclado con el olor a queroseno, la sensación que quedó fue de haber disfrutado no solo con un espectáculo apasionante, sino lleno de buenos momentos.

Agradezco a la organización del Helsinki International Air Show y a Elena Santana, las facilidades y la ayuda prestada durante el evento.

Eduardo Serradilla Sanchis