Paulino y el paro

La verdad es que las últimas cifras del paro en las islas y la promesa de Paulino Rivero de crear 80.000 empleos en año y medio a mí no me cuadran. Ayer en El Correíllo de CANARIAS AHORA RADIO el presidente de la Confederación Canaria de Empresarios, Sebastián Grisaleña, y el jefe del gabinete técnico de CCOO, José Miguel González, dijeron que tampoco a ellos les cuadran las cifras. El economista José Miguel González dijo que para generar 80.000 empleo hay que crecer un 11% y que eso no se va a dar en las islas. Según el técnico de CCOO lo que el ejecutivo está promoviendo es la firma de miles de contratos precarios, de personal que realiza tareas para las administraciones, también está subvencionando la seguridad social de las empresas. Pero con esas medidas no se pueden crear esos 80.000 puestos de trabajo que Rivero y el gobierno repiten machaconamente.

Mientras Rivero saca los 80.000 puestos de trabajo de su chistera, sería bueno que nos preguntemos: ¿Cómo hemos llegado hasta aquí?¿Por qué estamos en los peores puestos? ¿Por Wall Street?¿Por las subprime?¿Por Rodríguez Zapatero? Pues va a ser que no. Que el porcentaje del desempleo en Canarias ya era superior a la media del estado cuando no había nacido la gran crisis que nuestro gobierno ultraperiférico adivinó antes de que la escondiera Rodrigo Rato desde el mismo FMI. No podemos esperar que Paulino Rivero asuma la responsabilidad que le toca como dirigente del partido político que lleva en el poder autonómico hace 30 años (salvo algunos pocos años). No podemos esperar que el campeón de la propaganda haga un mínimo de autocrítica. Vale. Pero volver a echarle la culpa del paro en las islas a la inmigración suena a majadería poco presentable, a conejo que Paulino Rivero saca de la chistera en cada campaña electoraSí comparto con Rivero las críticas que hace a los empresarios del sector turístico tan rápidos a la hora de despedir desde que ven la crisis y tan lentos para contratar a personal cuando la ocupación sube al 100% y los beneficios crecen. Pero que se aclare el presidente con esos empresarios tan aliados suyos salvo en tiempos de campaña electoral.

Este martes el presidente del gobierno dijo en 59 segundos de TVE-C que Canarias es la comunidad que más empleos ha creado en los últimos años. Rivero achacó nuestro puesto entre los campeones del paro a la llegada de población foránea, sostiene nuestro Mencey que entre 1996 y 2007 aumentó la población de las Islas en 600.000 personas venidas de fuera y que eso hace imposible dar oportunidades de trabajo a todos. Pues yo también estoy de acuerdo en que vino mucha gente a las islas.

Pero ¿por qué vino mucha gente? ¿No lo sabe el presidente del gobierno?¿Acaso porque tenían interés en vivir en una comunidad gobernada por Coalición Canaria?¿Venían en peregrinación para adorar al padre Teide? Pues no. Hay estudios del Consejo Económico y Social de Canarias sobre la evolución de la economía y la demografía esos años que lo explican. También hubo un estudios de la comisión de expertos en población que se realizó durante la presidencia de Román Rodríguez. Sabemos que Rivero no se ha leído esos estudios porque con el tiempo que dedica a FacEbook y Twister apenas le quedan unos minutos para leer el almendro de Nicolás Estévanez.

Por eso, en un ejercicio de asesoramiento gratuito a nuestro Mencey vamos a recordarselo: el modelo económico de Canarias es lo que atrajo a miles de personas en las islas. En la década prodigiosa (1996-2007) vivimos una borrachera de cemento, piche, apartamentos, puertos deportivos, hoteles ilegales, viviendas para la RIC, destrucción de terreno agrícola, circunvalaciones, aparcamientos, rotondas? Se trata de un modelo económico especulativo que buscaba el crecimiento rápido y que para ejecutarlo necesitaba una mano de obra que no teníamos. Vino la gente por una causa muy sencilla: había trabajo. Y los trabajadores importados trajeron a su familia, sus hijos necesitaban escuelas y centros de salud.

Esa es la causa, señor presidente, así de sencillo. ¿Cuál es su modelo actual de Canarias?¿Lo tiene? Pues no. Pero sus apuestas nos dan una pista. Bueno, varias pistas: la nueva pista del aeropuerto de Gran Canaria, la nueva pista del aeropuerto de Reina Sofía, las pistas que conducen al puerto de Granadilla, los acuerdos con compañía aéreas de bajo coste para traer un millón de turistas más (aunque dejen menos renta). Estos datos nos indican que el gobierno sigue apostando por el mismo modelo. De la frase “más talento y menos cemento” pronunciada en su discurso de investidura hemos pasado a lo de siempre “buscamos un millón de turistas más”, “sólo saldremos de la crisis con el binomio turismo-construcción”. Así que seguimos apostando por el mismo modelo económico que nos llevó a las colas del desempleo. Un modelo que ha enriquecido a los patrocinadores de las campañas electorales de los que nos gobiernan, pero que ha provocado grandes bolsas de pobreza. El modelo no lo eligieron los que vinieron de fuera a trabajar, por eso culparlos a ellos es un ejercicio de cinismo político y de irresponsabilidad política. Pero a estas alturas de la película uno no esperaba otra cosa.

Juan García Luján