Espacio de opinión de Canarias Ahora
Psicosis en Telde
La escena pertenece a la película “Psicosis” de Alfred Hitchcock. El largometraje de casi dos horas que el director británico realizó en 1960 contó con la música de Bernard Herrmann. El rodaje de la escena de la ducha duró siete días y se realizó bajo 78 ángulos diferentes. Al principio Hitchcock no quería poner música en esa escena. Pero Herrmann lo convenció. En otro momento de la película la protagonista huye después de haber robado 40.000 dólares que su empresa le había dado para ingresar en el banco. La escena de la huída es muy sencilla: un plano de ella al volante, otro de la carretera y otro de la policía sobre el retrovisor. Después de salvarse del control policial comienza una tormenta, ya es de noche, la mujer conduce bajo la lluvia con cara de pánico. Al final decide pararse a dormir en un motel, en el mismo lugar donde se producirá la escena de la ducha. Si le quitamos la música de Herrmann que acompaña a estas escenas podríamos pensar que estamos viendo una bella mujer que va camino de su trabajo. Pero la música añade una tensión a las imágenes que nos mete el miedo en el cuerpo y nos hace presagiar que a la protagonista le va a ocurrir algo grave en ese motel al que llega en una noche de tormenta.
Desde el pasado viernes por la tarde los medios de comunicación de las islas estamos asistiendo a una película que podría llamarse “Psicosis en Telde”. La primera escena es muy sencilla: un hombre se acerca a una niña de diez años y le dice que le acompañe a su coche. La niña se niega. Varios testigos presencian los hechos y gritan. En medio de la confusión el hombre se marcha en una furgoneta blanca. La noticia aparece en la portada de los periódicos durante varios días. La foto de la víctima de espaldas abrazada a sus padres se repite varias jornadas. Aunque no salen los apellidos de la menor, los padres están de frente y cualquiera que vea por la calle a la niña con sus padres podrá reconocerlos perfectamente. El gobierno municipal de Telde reaccionó de forma inmediata, Francisco Santiago anunció que estaban estudiando la posibilidad de reunir a todos los alcaldes de Gran Canaria para analizar qué medidas pueden tomar los ayuntamientos para evitar el secuestro de menores.
Ayer miércoles se rodó otra escena. Según varios periódicos digitales la policía confirmó que en una comisaría de Telde se había presentado una denuncia por otro presunto intento de secuestro de una joven de 14 años. En la noticia se contaba que alguien la había intentado raptar a las ocho menos cuarto de la mañana, cuando se dirigía al instituto del barrio de Casas Nuevas en Telde. Cuando se presentó la denuncia no se conocía la noticia de que diez horas antes la policía había detenido al presunto autor del intento de rapto de la niña de la Garita. Los únicos datos que había es que se presentó una denuncia, pero se desconocía si quien denunció fue la menor, sus familiares o los profesores del instituto, tampoco se sabía si el presunto secuestrador frustrado tenía una furgoneta blanca. A pesar de esta falta de datos la información estaba en todas las portadas y se contó en todos los informativos. Horas después el alcalde de Telde nos contó una versión de los hechos diferente a la dada por la policía. No hubo ningún intento de secuestro ni furgoneta blanca. Según Francisco Santiago lo que ocurrió fue que un hombre intentó violar a una adolescente. El alcalde de Telde aseguró que “los psicópatas que forman parte de este mundo quieren tener su minuto de gloria”.
Tiene razón Francisco Santiago cuando habla de los psicópatas que buscan su minuto de gloria, pero podía haber dicho también que a esa gloria puede contribuir su propia reacción alarmista anunciando una posible reunión de todos los alcaldes grancanarios, como si todos los días estuvieran secuestrando a un chiquillo en esta isla. Creo que la reacción política del gobierno municipal de Telde y la reacción de la prensa a la denuncia de un presunto intento de rapto están abonando el terreno para una psicosis colectiva. Resulta curioso que un gobierno municipal formado por Nueva Canarias y el PSOE que en su día criticaron la propuesta parlamentaria de Coalición Canaria y el Partido Popular para crear una comisión de investigación sobre las desapariciones de Sara Morales y Yeremi Vargas hayan reaccionado ahora con la misma actitud alarmista e irresponsable que hicieron los partidos del gobierno canario. Los periodistas estamos haciendo el trabajo de Berrmann en la película de Hitchcock. Ponemos la música de terror. Con los titulares, la repetición de fotos y portadas con la presunta víctima del presunto intento de rapto y con el anuncio de nuevos secuestros que no se han producido colaboramos a la psicosis. Estamos convirtiendo el colegio de nuestros hijos, o el parque infantil en un motel perdido en una noche de tormenta. Vamos a terminar revisando el cuarto de baño de casa cada vez que un chiquillo entra en la ducha, no vaya a ser que Norman Bates aparezca con su cuchillo. El alcalde de Telde está haciendo el papel de Hitchcock, pone el escenario y los personajes políticos. Así que si ya está todo el mundo listo, podemos comenzar a rodar la película “Psicosis en Telde”, vamos a intentar asustar un ratito al personal. A meterle el miedo en el cuerpo a la gente, que aunque no logremos encontrar a Yeremi y a Sara, por lo menos los políticos dan la imagen de que les preocupan los temas de la calle y las empresas logran vender más periódicos o aumentar las audiencias televisivas. No hay mal que por bien no venga.
Juan GarcÃa Luján
Sobre este blog
Espacio de opinión de Canarias Ahora
0