Es un centro comercial tirando a pequeño, pero con encanto. Alberga un supermercado, varios restaurantes, una tienda de jardinería y un centro de rehabilitación, entre otros establecimientos. Es el único centro de este tipo en la zona de Tafira-Monte, y está siempre muy concurrido. Este miércoles se armó tras la decisión de los propietarios de ejecutar el vallado de los aparcamientos, una vez los tribunales les han dado la razón en primera instancia, lo que convierte este centro en el primero de su clase sin lugar para el estacionamiento de vehículos, tanto de clientes como de proveedores. Los primeros afectados, los pacientes del centro de rehabilitación, que deberán recorrer muchos más metros y bajar unas escaleras. El Ayuntamiento anuncia que tratará de solucionarlo, pero ya adelanta que la cosa se presenta muy difícil.