Efectivamente, del análisis sesudo de las cuentas del PP municipal de Santa Cruz durante el mandato anterior a que llegara Ángel Llanos (a ver si lo van pillando, que empezamos a ser mayorcitos) se detecta que el 14 de abril de 2006 alguien compra en Benetton “dos prendas de ropa interior” que son posteriormente cargadas a la caja del grupo municipal. La Intervención General del Ayuntamiento escribe en su informe que “parece que es un gasto personal que no tiene relación con la actividad del grupo”, una frase que se repite en multitud de ocasiones a lo largo de la auditoría. Cualquiera que conozca a las dos concejalas que pudieran tener relación con esa adquisición descartaría de plano que pudiera tratarse de prensas íntimas para Cristina Tavío, que si bien aparece en el informe gastando a espuertas en otros conceptos como viajes a Madrid, es incapaz de ceñirse bragas o sostenes que en total costaran 33,80 euros. Cabría por tanto atribuir esa inversión a su compañera Maribel Oñate, que en la misma tienda pagó 4,40 euros por un collar y una pulsera y también le pasó la factura al grupo municipal del PP.